Eneldo Bio (maceta)

El Eneldo, en latín Anethum graveolens, es una planta herbácea anual reconocible por su follaje muy fino, casi plumoso, que contiene un sabor anisado fino pero potente. Es una especie relacionada con el hinojo, también conocida como Hinojo Bastardo y Falso Anís. Originaria de la cuenca mediterránea y Asia central, esta planta aromática es curiosamente mucho más utilizada en las cocinas nórdicas y anglosajonas que en otras cocinas del mundo. Se emplea especialmente para acompañar pescados, en salsas y marinadas. También se puede plantar eneldo por el atractivo de su follaje, su hermosa floración en umbelas amarillas y sus semillas que también son condimentarias. Plántelo en primavera, después de las heladas, y coseche las hojas y semillas de mayo a octubre.

Nuestras plantas están certificadas como procedentes de la Agricultura Ecológica.

El Eneldo pertenece a la familia de las Apiáceas (ex-Umbelíferas). Esta planta de crecimiento rápido germina, se desarrolla, florece y produce semillas en el espacio de un año. Antaño espontánea en el perímetro mediterráneo, el eneldo ha conquistado la península ibérica y Europa del este antes de ser adoptado en muchos países del norte de Europa. Es una especie de tierras bien drenadas, incluso pedregosas, que teme los suelos excesivamente húmedos y compactos. Forma un mechón de aspecto vaporoso que puede alcanzar 1 m de altura por 30 cm de envergadura en buenas condiciones. Su follaje está compuesto por hojas fuertemente divididas en segmentos filiformes y son de un verde bastante oscuro. El eneldo florece en verano, más o menos temprano según el clima, en forma de encantadoras flores en umbela de un hermoso amarillo ácido, en largos tallos. Esta floración ligeramente perfumada es muy visitada por las abejas. Da lugar a numerosas semillas marrones muy aromáticas, maduras a finales de verano.

En la cocina: las hojas se consumen crudas, picadas, siempre al final de la cocción y a fuego lento, ya que sus aromas volátiles son destruidos por el calor. El Eneldo se cultiva por sus hojas pero también por sus semillas. Se utiliza para aromatizar pescados, marinadas, salsas frías a base de crema o yogur, marinadas, huevos y carnes blancas, queso fresco, ensaladas verdes y ensaladas de frutas. El sabor del eneldo es maravilloso en los pepinos con crema, con papas, en el Tzatziki, pero también en albóndigas. Sus semillas adornan el caldo, los panes, los pasteles, los guisos, las hojas de vid y la choucroute y alivian los males digestivos. El Eneldo también se consume en infusión, ya que favorece el sueño.

En el jardín ornamental: también es una bonita anual que encanta a los insectos y que puede lucirse sin complejos en el jardín ornamental o en ramos campestres. Lo instalará al sol en un suelo más bien rico, ligero y bien drenado.

La cosecha: al principio del crecimiento, coseche las hojas según sus necesidades y luego disfrute de su hermosa floración durante algunas semanas y, después de la formación de semillas, corte las flores, recoja las semillas y déjelas secar sobre papel periódico o una tela.

La conservación: es posible conservar las hojas y semillas de eneldo, después de secar a la sombra, en cajas herméticas.

Los consejos del jardinero: el eneldo será un muy buen compañero para muchas de sus plantas hortícolas: repele la mosca de la zanahoria, los pulgones, las arañas rojas y la polilla del puerro. La cercanía del repollo hace que el eneldo sea más resistente y productivo.