Chirivía Arrow

La chirivía (Pastinaca sativa) es una hortaliza antigua, cultivada desde la Edad Media. Su forma silvestre crece espontáneamente en Francia y Europa. Pertenece a la familia de las Apiáceas, al igual que la zanahoria, a la cual está bastante cercana.

Es una hortaliza que ha experimentado un renovado interés, totalmente merecido, en los últimos años. Su sabor bastante característico acompaña los potajes y perfuma las sopas. También se consume frita, salteada, en puré, gratinada o a la bechamel. Cruda y rallada, se degusta en verduras y hortalizas crudas, sola o acompañada de remolacha, zanahoria, apio-rábano...). La chirivía posee propiedades diuréticas, nutritivas y antirreumáticas, contiene vitaminas C y B y sales minerales.

La chirivía requiere una fertilización normal (3kg/m²) a base de estiércol y compost bien descompuesto a finales del otoño o principios de la primavera. Atención, no tolera los abonos orgánicos sin descomponer.

Cosecha y conservación: la cosecha se realiza en noviembre, se cortan las hojas y se dejan secar las raíces durante algunas horas en el suelo antes de guardarlas en la bodega. También se puede dejar la chirivía en la tierra y recolectar sus raíces según las necesidades. En este caso, es preferible cubrir el suelo con paja o hojas secas.

El truco del jardinero: En climas suaves, es posible sembrar la chirivía hacia finales de septiembre.