En Promesse de fleurs, cada día intentamos combinar el respeto por cada uno de nuestros empleados, clientes y socios con los intereses de la empresa. La interdependencia armoniosa de todos es la clave del éxito.

Buscamos la sencillez, la cercanía, la cordialidad y el apoyo mutuo.

Cultivamos la buena voluntad y la confianza. En Promesse de fleurs, el derecho a equivocarse nos permite fomentar la iniciativa y encontrar soluciones, para que todos puedan crecer.

Respetamos la individualidad de cada uno, garantizamos un alto grado de equidad e igualdad de derechos y deberes; y promovemos el desarrollo de las competencias de cada uno.

La colaboración es la base de nuestro trabajo en Promesse de fleurs. Mantenemos un estado de ánimo positivo basado en la comunicación. A diario, escuchamos, hablamos, negociamos, nos comprometemos y coordinamos, para que todos podamos tener sentido y avanzar juntos en la misma dirección.

Todos desempeñamos un papel clave al servicio del cliente y de la empresa, y nos esforzamos por desarrollar nuestra versatilidad y adaptabilidad.

Nos esforzamos por ser justos y evitar la arbitrariedad.

Fomentamos la solidaridad en los momentos difíciles y el reparto de los éxitos. Hacemos partícipes a todos de las decisiones y los resultados de la empresa.

En Promesse de fleurs, exigimos un alto nivel de compromiso por parte de todos. Cultivamos el compromiso y el sentido del esfuerzo. Somos lúcidos, rigurosos y muy reactivos.

Cada uno busca desarrollar sus competencias y su autonomía. Todos aceptan tomar y asumir la responsabilidad de las decisiones que les competen.

Nuestra ambición nos impulsa a innovar y progresar. Fomentamos la aparición de nuevas ideas y proyectos y nos damos los recursos y el tiempo necesarios para llevarlos a buen puerto.

Dar ejemplo es un valor clave. Nos aplicamos a nosotros mismos lo que pedimos a los demás y damos ejemplo.

La integridad es un valor clave. No engañamos, ni a los clientes, ni a los compañeros, ni al personal, ni a los socios, ni a la empresa.

Ser auténtico, ser veraz, es cosa de todos.

Nos atrevemos a decir las cosas, se comparte la información, buena o mala, fomentamos la transparencia y la honestidad.

Intentamos que las cosas sean sencillas y no nos escondemos detrás de la complejidad. Reconocemos las dificultades y los fracasos, y buscamos la manera de superarlos. En Promesse de fleurs, podemos decir "me equivoqué".