Almendro

El Almendro (Prunus dulcis) es un pequeño árbol frutal de gran belleza. También es uno de los primeros árboles frutales en florecer en el jardín. Sus pequeñas flores blancas a rosadas florecen abundantemente, desde finales del invierno, en las ramas aún sin hojas, de febrero a marzo-abril. Son seguidas por una fructificación generosa, a veces incluso desde el mes de julio. En anatomía vegetal, la almendra se refiere al interior de la semilla. Los frutos del Prunus dulcis se llaman así porque solo se consume esta parte del fruto. La cáscara, más o menos dura o tierna según las variedades, no es comestible.

El Almendro es originario de la cuenca mediterránea, aprecia los climas cálidos, tolera la sequía y teme los suelos húmedos. Su porte erecto se redondea con la edad, alcanzando una altura de 5 a 6 m en la madurez. Los almendros son más o menos autoestériles o autopolinizantes, pero serán en todos los casos más productivos en presencia de otra variedad o individuo. Recomendamos plantar su almendro en otoño para favorecer un buen enraizamiento antes del invierno, ya que este árbol entra en vegetación muy temprano. Si el almendro en sí no teme el frío, es su floración la que puede ser destruida por las heladas tardías. Descubra nuestra selección de variedades consideradas 'tardías' o más tempranas, para elegir según su clima. Y para ir más lejos, consulte también nuestro consejo "Cómo elegir sus árboles frutales".

Para saberlo todo, consulte nuestro dossier "El almendro: plantar, podar, cosechar"