Anémona

La Anémona es una hermosa flor vivaz de la familia de las Ranunculáceas originaria del hemisferio norte, en particular de Asia templada. La Anemone coronaria, la imprescindible Anémona de los floristas que se presenta en una multitud de variedades, quizás sea la más conocida de este género que reúne más de 100 especies. Al igual que la 'Anémona del Japón' o la Anémona de los bosques Anemone nemorosa, las anémonas suelen ser plantas de sotobosque. Todas desarrollan una roseta de follaje basal palmeado y llevan flores en forma de estrellas o copas con al menos 5 pétalos, de color variado.

El género Anemone suele dividirse en dos grandes categorías: las anémonas de raíces fibrosas como la Anemone hupenhensis (la anémona japonesa), que florece en otoño (¿quién no conoce la famosa 'September Charm'?), y las anémonas tuberosas y rizomatosas como por ejemplo la Anemone blanda, que florece principalmente en primavera. La mayoría de las anémonas de sotobosque son muy resistentes y aprecian los suelos frescos, húmicos y la luz solar tenue. Las anémonas tuberosas, por su parte, son un poco más delicadas. Prefieren el pleno sol y suelos que permanezcan secos durante su período de latencia, que a menudo coincide con el verano.

Por lo tanto, existen anémonas para cada situación: según las especies, animan las zonas sombreadas del jardín, aportan un toque de color a los macizos soleados de primavera o decoran la rocalla desde los primeros días de buen tiempo. También se cultivan muy bien en macetas en la terraza o el balcón. Para obtener más información sobre las anémonas, consulte también nuestras fichas de consejos "Plantar Anémonas Blandas, Nemorosa o de Caen", o "Bulbos de floración primaveral: cómo plantarlos".