Lilas para setos

El Lila, Syringa vulgaris, es un vigoroso arbusto caduco utilizable en un seto, apreciado por su floración primaveral en racimos muy perfumados, simples a dobles. Presenta tonos blancos ('Madame Lemoine'), rosados ('Belle de Moscou'), malvas ('President Grevy'), violetas e incluso púrpuras ('Charles Joly'). Rústico, poco exigente, requiere poco mantenimiento, dotado de un encanto romántico y salvaje a la vez, por lo tanto, constituye una excelente planta de seto. El Syringa vulgaris puede alcanzar hasta 5 m de altura en la edad adulta y puede extenderse hasta 3,50 m, con un porte erguido y una vegetación tupida. Su floración tiene lugar en abril y mayo, difundiendo a su alrededor un aroma muy agradable, floral y dulce. Muy apreciadas por las mariposas, sus flores también son valoradas en los ramos. Algunas variedades antiguas tienden a extenderse mediante la producción de retoños, lo cual puede ser útil cuando se desea crear un seto florecido y natural. Todos los lilas comunes pueden ser utilizados en un seto.

De cultivo fácil en cualquier suelo drenado, bajo casi todos nuestros climas, el Lila es un arbusto o un pequeño árbol imprescindible en un jardín de flores. En un seto libre, acompaña a los seringats (Philadelphus), kolkwitzias, forsitias y otros buddleias cuyas floraciones se sucederán. Descubre todo lo que necesitas saber y nuestros consejos en nuestro completo dossier:  "Lila, syringa: plantar, podar, mantener"