Mini kiwi Pink Jumbo - Actinidia arguta

El Kiwai o Mini kiwi de Siberia 'Pink Jumbo' es una selección femenina del Actinidia arguta, que se distingue por sus frutos de colores atípicos, rojo por fuera, verde por dentro. Esta bonita coloración de los frutos proviene de la hibridación con el Actinidia purpurea. Bajo su piel lisa y fina se encuentra una pulpa jugosa, con un sabor afrutado y dulce. Lo que convierte a este kiwai en una fruta deliciosa para consumir fresca, incluso con la piel. Esta fruta energizante y refrescante, de tamaño similar a una uva grande, de forma alargada, es particularmente rica en vitamina C. Se recomienda plantar en otoño, y la cosecha se realiza en septiembre a partir del segundo o tercer año.

Con una producción muy alta, 'Pink Jumbo' alcanza la madurez hacia mediados de septiembre y las cosechas se extienden hasta mediados de octubre. Se trata de un pie femenino que requiere la presencia de un pie macho cercano, por ejemplo la variedad ‘Prince Jumbo’ o el  Kiwai Nostino que permitirán la polinización. Además de sus cualidades frutales, esta planta voluble con un follaje de un hermoso verde brillante, en forma de corazón, es capaz de decorar una pérgola, una espaldera o una carpa de jardín.

En la categoría de los kiwis, encontramos el Kiwi ornamental (Actinidia kolomikta), el Kiwi (Actinidia chinensis o deliciosa) con la piel peluda, y el Mini kiwi (Actinidia arguta) de piel lisa también llamado Mini kiwi de Siberia, Mini kiwi o Kiwi de verano. Los tres pertenecen a la familia de las Actinidiáceas. El Kiwaï es originario de Asia y produce largos tallos volubles que pueden alcanzar de 4 a 6 m de longitud. Muy resistente hasta -20°C, su follaje es caduco. Los tallos llevan hojas de 8 a 10 cm de longitud, verdes en forma de corazón. En junio-julio, en las axilas de las hojas, aparecen flores perfumadas y melíferas, de color blanco crema con anteras púrpuras, agrupadas de tres en tres.

En el Kiwaï 'Pink Jumbo', los frutos de forma alargada de 2,5 a 4 cm de diámetro por 5 a 6 cm de longitud, de piel lisa y fina, alcanzan su madurez en septiembre-octubre. Pueden conservarse una o dos semanas después de la recolección. La pulpa verde, dulce, perfumada y ligeramente ácida, recuerda un sabor exótico. Rico en calcio y vitamina C, se consume entero. La fructificación comienza 2 a 3 años después de la plantación. Al igual que con el Kiwi, un pie macho puede asegurar la fecundación de 4 a 5 pies femeninos.

Además de sus cualidades frutales, su follaje exuberante, su floración perfumada y la generosidad de sus tallos proporcionan al Kiwaï un uso y una utilidad ornamental en el jardín. Esta planta necesita ser guiada en un soporte sólido como hilos tensados en un soporte, una espaldera, una pérgola, una carpa de jardín o una cerca. Prefiere una tierra ligera, fresca, no calcárea y una exposición soleada. Es agradable consumir y disfrutar de las frutas naturales desde la recolección. También se conservan muy bien durante unas dos semanas en el refrigerador. La producción puede alcanzar hasta 40 a 50 kg por planta. El Kiwaï se puede consumir fresco, su sabor es refrescante y suave, todo un deleite. Se apreciará en tartas, ensaladas de frutas, postres lácteos, mermelada, gelatina, compota, jugos de frutas, cócteles. Como una verdura dulce, puede acompañar tiernamente platos de carnes blancas (aves, ternera, cerdo…).