Higuera Sucre Vert

El Ficus carica Sucre Vert es una variedad de higuera unífera, de maduración tardía, reconocida por su excelente sabor gustativo de higos calificados como "blancos". De buen tamaño y forma redondeada, esconden bajo su epidermis amarillo-verde claro una pulpa clara o a veces roja particularmente dulce, con un delicado aroma a miel. El árbol en sí tiene una vigorosidad media, pero es particularmente denso en follaje, muy ornamental. Los higos Sucre Vert se cosechan desde septiembre hasta principios de noviembre. Esta variedad, que necesita veranos largos y soleados, es adecuada para el Sur de nuestro país.

La Higuera Sucre Vert (sinónimos Cougourdane, Mussega, Figue Reine) forma un árbol de 4 a 5 m de altura, muy a menudo tan ancho como alto, muy frondoso. Produce una sola cosecha al año, bastante abundante, desde principios hasta finales de otoño. Da frutos de tamaño medio a grande, que pesan de 60 a 70 gramos, con piel bastante fina que va del verde al amarillo-verde claro cuando maduran. Su pulpa, suave y fundente, pobre en semillas, es particularmente dulce y muy agradablemente aromática. El Higo se utiliza en la elaboración de platos dulces (tartas, clafoutis, compotas...) o salados en combinación con queso de cabra, jamón serrano o foie gras. También se pueden hacer deliciosos helados con higos. Después de la cosecha, no se recomienda conservarlos en el frigorífico, ya que altera los aromas del Higo y la piel puede sufrir por la humedad y la condensación. La mejor manera de consumirlos sigue siendo en la mesa, y degustarlos bajo el árbol, conservando así su perfume a miel.

La cosecha se realizará en varias ocasiones, a medida que los higos maduren. Esta variedad es autofértil y partenocárpica, lo que permite obtener frutos sin fecundación. No necesita tener otros pies de Higuera y no requiere la intervención del blastófago, único insecto polinizador de la higuera, demasiado frágil para sobrevivir en climas fríos.

Originario de Turquía y Asia Menor, el Higuera (Ficus carica) pertenece a la familia de las Moráceas. Es un pequeño árbol caducifolio, de porte redondeado extendido, con tronco a menudo retorcido. Las hojas son rugosas, de un verde intenso que se vuelve amarillo en otoño, finamente velludas, relativamente grandes (a veces de 20 cm de largo) y con un largo pecíolo. El limbo está profundamente dividido en tres a siete lóbulos crenados (generalmente cinco) de forma variable, con el revés aterciopelado, con venas prominentes. La madera es blanda y esponjosa, la corteza gris y lisa. El sistema radicular de este pequeño árbol es potente, extendiéndose en todas direcciones.

La Higuera es a menudo considerada como uno de los árboles frutales más hermosos. Su follaje original le confiere un carácter ornamental y ofrece una agradable sombra, especialmente durante los calores estivales. Plante la Higuera resguardada por una pared que la proteja del frío en inviernos rigurosos, con exposición sur o suroeste, junto al Granado de frutos, el Moral blanco y el Níspero del Japón en las regiones del sur de nuestro país. En el norte, se puede asociar con el Membrillero, la Akebia quinata, el Guayabo que también son rústicos y exóticos. Tenga en cuenta sus dimensiones en la edad adulta para determinar la distancia a la que plantar. Aunque las raíces no dañan las construcciones modernas, pueden causar daños en muros de piedra seca o con morteros pobres, al estilo antiguo.