Vid Aperina bianca

Esta Vid 'Aperina Bianca' forma parte de una serie de descendientes de la uva Sultanina (sinónimo de Thompson Seedless), una variedad conocida como "sin pepitas" cultivada a gran escala para la producción de uvas pasas. Todos comparten la característica de producir granos calificados como apirénicos, cuyas pepitas son atrofiadas. Son muy agradables de degustar, ¡y serán un festín para los niños! Esta variedad Bianca se asemeja a la Italia, es vigorosa y resistente al frío. La planta produce grandes racimos de frutos ovales, de buen tamaño, con la piel un poco gruesa, y la pulpa jugosa, carnosa y dulce. La cosecha se realiza, según las regiones, años y clima, desde finales de agosto hasta mediados de septiembre.

'Aperina Bianca' pertenece, como todas las vides, a la familia de las Vitáceas. Su progenitor, la vid sultanina, es un híbrido muy antiguo, posiblemente originario de Afganistán, que pertenece a la categoría de las uvas blancas de mesa. La Sultanina es una planta vigorosa que debe podarse largamente a finales de invierno, ya que sus primeros brotes no producen flores. Transmitió esta característica a todos sus descendientes apirénicos.

La vid 'Aperina Bianca' es un arbusto sarmentoso y trepador cuyos tallos serpenteantes provistos de zarcillos pueden superar los 5 m de longitud con el tiempo. Forma un tronco, a menudo nudoso y retorcido, cubierto de una corteza fibrosa y marrón que se desprende en pedazos con la edad. Sus largos tallos verdes llevan hermosas hojas de forma redondeada, recortadas en los bordes, de color verde medio que se torna amarillo antes de caer en otoño. Florece a finales de primavera, de mayo a junio dependiendo de las regiones, en forma de racimos densos y bien formados, de forma piramidal, cargados de diminutas flores verdes. Tras la polinización por los insectos se forman las bayas que llamamos uvas. Bajo su piel verde a verde-dorada, bastante gruesa y cubierta de pruina blanca, la pulpa es de color verde claro, prácticamente sin pepitas reales. Jugosa y dulce, revela un aroma ligeramente musgoso. Esta variedad se poda a finales de invierno, después de las heladas, por encima de 6-8 yemas (brotes) para favorecer la formación de nuevos brotes florales.

Contrariamente a la creencia popular, las uvas sin pepitas no son organismos genéticamente modificados, sino que provienen de un proceso de selección complejo realizado por especialistas de la vid. Son frutos portados por plantas híbridas estériles, cuyas semillas, o pepitas, son incapaces de desarrollarse: reducidas a su mínima expresión, estas semillas apenas son detectables en la boca.

Plantada al sol, la vid Aperina Bianca será muy decorativa a lo largo de una pared, en una tonnelle, una pérgola, en suelo abierto o en una gran maceta en una terraza. Este cepaje, tanto goloso como decorativo, será apreciado para embellecer los jardines. Sus frutos se consumen tal cual, mezclados en ensaladas de frutas, en jugo, o para adornar tartas.