Aesculus x carnea Plantierensis - Castaño de Indias rojo híbrido​

El Castaño de Indias híbrido Aesculus x carnea Plantiriensis es un gran castaño de Indias híbrido, un árbol majestuoso que puede reemplazar perfectamente al Castaño de Indias común en parques y grandes jardines. Este híbrido ofrece una floración primaveral tan decorativa, pero no produce frutos. El árbol requiere un suelo fértil, fresco y húmedo, preferiblemente ligeramente ácido a neutro. Es sensible a la sequía: en caso de estrés hídrico, sus hojas se secan y caen.

El Castaño de Indias híbrido Aesculus x carnea Plantiriensis es un híbrido hortícola obtenido a mediados del siglo XIX en los famosos viveros franceses "Simon-Louis Frères" en Plantières cerca de Metz, a partir de una siembra de castaño de Indias rojo (Aesculus x carnea). Se trata de un híbrido llamado retrogrado con uno de sus progenitores, es decir, el castaño de Indias (Aesculus hippocastaneum). Las características de este progenitor predominan sobre el árbol. 'Plantiriensis' forma un árbol con un tronco rectilíneo de 12 a 15 m de altura por 8 a 10 m de envergadura, perfectamente rústico. Presenta una corona amplia, ligeramente abombada, que filtra eficazmente la luz. Sus hojas caducas, de 15 cm de ancho, están divididas en 7 folíolos elípticos y gofrados, con algunas grandes dentadas, de color verde oscuro. Su reverso es ligeramente más claro. Se tornan de amarillo a bronce en otoño antes de caer. Las inflorescencias, en forma de grandes panículas cónicas erguidas, alcanzando los 30 cm de longitud, florecen en mayo-junio. Las pequeñas flores, abundantes, son de color blanquecino a amarillo pálido, con toques de rosa carne. Las flores son nectaríferas y melíferas, pero estériles, lo que evita la formación de frutos que a menudo se consideran una molestia para el mantenimiento del jardín. El tronco de este castaño de Indias está cubierto de una corteza lisa, de color gris oscuro.  

El Castaño de Indias híbrido Aesculus x carnea 'Plantiriensis, antaño plantado a lo largo de avenidas, ha caído un poco en desuso. Se utiliza principalmente como ejemplar aislado en un gran jardín, pero también en alineación para bordear los pasillos de un parque. Puede acompañar la floración del castaño de Indias de flores blancas cremosas, así como la de un tilo de hojas grandes y del árbol de las abejas. A sus pies, plante, por ejemplo, un tapiz de violeta olorosa del que disfrutará desde principios de primavera.