Camellia reticulata Lovely Lady

La Camellia reticulata 'Lovely Lady' merece plenamente su nombre, ya que su floración es sin duda una de las más bellas de su género. Esta variedad produce a finales del invierno grandes flores con numerosos pétalos que forman corolas muy completas, con una estética muy gráfica. Emitidas en abundancia, las flores de un rosa perlado destacan visualmente sobre el fondo verde oscuro, atrayendo todas las miradas en el jardín en esta época del año. Su encanto romántico anuncia la primavera de la manera más agradable. Con una rusticidad algo limitada, este Camelia se sentirá a gusto en un clima oceánico fresco, con inviernos no demasiado fríos. Necesita un suelo ligeramente ácido, suficientemente húmedo pero bien drenado, y una exposición a media sombra.

El Camelia pertenece a la familia de las Theaceae, a la que aporta una alta importancia cultural y económica a través de la especie Camellia sinensis, cuyas hojas se utilizan para producir té. Esta pequeña familia vegetal cuenta con una decena de géneros, algunos ornamentales como el Stewartia pseudocamellia, poco conocido pero muy ornamental por sus flores, que recuerdan a las de algunos Camelias, sus magníficos colores otoñales y su corteza decorativa. Según las clasificaciones botánicas, existen entre 100 y 250 especies de Camelias, siendo la más conocida la C. japonica, importada a Inglaterra en 1739 y muy de moda en la primera mitad del siglo XIX. El Camellia reticulata, por su parte, es apreciado por sus flores, las más grandes de su género. Se encuentra de forma natural en la provincia de Yunnan (sur de China), en un clima subtropical húmedo. Crece en zonas montañosas hasta una altitud de 3000 m, pudiendo alcanzar un pequeño árbol de 10 m de altura o más.
El Camelia 'Lovely Lady' mostrará un desarrollo mucho más modesto en nuestras latitudes. Esta variedad fue creada por el seleccionador australiano Edgar R. Sebire, de Wanding North (cerca de Melbourne). Entre 1969 y 1989, este apasionado registró más de 60 nuevas variedades de su arbusto favorito, tanto híbridos de C. japonica, C. reticulata, C. sasanqua (Camelias de otoño), C. saluensis y otros... La mayoría fueron lo que se llama "plantas de semillero", es decir, plantas jóvenes seleccionadas por su diferencia (mutación u otra) dentro de un semillero. 'Lovely Lady' es un buen ejemplo de esto, derivado de una semilla original de C. reticulata 'Pink Sparkle', una variedad estadounidense con flores muy grandes (14 cm de diámetro) semidobles y de color rosa. El primer ejemplar floreció en 1979 y esta nueva variedad se registró dos años más tarde para ser lanzada al mercado.
'Lovely Lady' forma un arbusto de tamaño medio, de porte erecto y vegetación muy densa. Un pie generalmente alcanza después de unos 10 años de cultivo aproximadamente 1,40 m de altura por 1,10 m de ancho en nuestras condiciones climáticas, pero los viveristas neozelandeses reportan dimensiones más grandes en sus latitudes, alrededor de 3 m de altura por 2,5 m de envergadura. Los numerosos tallos con corteza marrón llevan hojas elípticas alargadas, que miden 12 cm de largo por 5 cm de ancho, sostenidas por cortos pecíolos. Finamente dentadas en el borde, las hojas son de un verde muy oscuro, y su superficie es brillante, casi barnizada. Persistentes, son ornamentales en todas las estaciones y realzan bellamente la floración, que se extiende de febrero a abril. Muy abundantes, las flores presentan un diámetro imponente, de hasta 12 cm, y su bello tono rosa perlado contrasta maravillosamente sobre la vegetación oscura. Muy dobles, las corolas están formadas por aproximadamente 70 pétalos, que casi logran, por su número, ocultar el corazón de estambres amarillos. Las flores son absolutamente magníficas, compitiendo visualmente con las rosas más hermosas, al menos en apariencia, ya que carecen de perfume.

El Camelia 'Lovely Lady' merece plenamente su lugar en las regiones costeras atlánticas, en suelo ácido, húmedo y bien drenado. Plántelo en el borde de los árboles para protegerlo del sol, y plante junto a él otras plantas ornamentales con necesidades similares para formar un magnífico macizo de flores. El Magnolia laevifolia 'Achteraan' de follaje verde oscuro tomará el relevo de su Camelia con sus flores blancas cremosas perfumadas que se abren en abril y mayo. Para crear un contraste de follajes, plante en primer plano de su macizo un Pieris japonica 'Little Heath' de hojas lanceoladas de un verde más claro bordeado de blanco, cuyos brotes jóvenes emergen en tonos rosados en primavera. Mucho más imponente, el Rhododendron ponticum 'Variegatum' también ofrece un hermoso follaje variegado blanco, acompañado de una abundante floración morada en mayo-junio. Colóquelo en el fondo, junto a un Acer palmatum 'Trompenburg', un magnífico Arce japonés cuyo follaje profundamente cortado varía entre el rojo brillante y el púrpura según las estaciones, y así obtendrá una escena de gran calidad ornamental.