Camellia transnokoensis Sweet Jane

La Camelia Sweet Jane es un arbusto tupido de porte flexible, con una apariencia muy natural, que lleva muy bien su nombre de camelia campestre. Dotado de un encanto increíble, produce a principios de primavera abundantes flores pequeñas que se asemejan a diminutas rosas, flores de muñeca que desafían a las lloviznas. Cuando están en botón, son de color rosa, se abren en rosa pálido alrededor de un centro un poco más intenso, salpicando un hermoso follaje perenne de un encantador color bronce cobrizo al brotar. Su desarrollo moderado es ideal para la realización de setos floridos o para el cultivo en macetas en la terraza.

Esta variedad hortícola proviene de un cruce con el Camellia transnokoensis, una especie botánica de follaje perenne originaria de las zonas montañosas de Taiwán. Como todos los camelias, pertenece a la familia de las teáceas. 'Sweet Jane' presenta una porte generalmente erguida, más alta que ancha, y una vegetación densa, sostenida por ramas flexibles. Su crecimiento es lento: a los 10 años, alcanzará aproximadamente 1 m de altura por 80 cm de envergadura. Una planta adulta promediará 1,20 m de altura por 90 cm de ancho, dependiendo de las condiciones de cultivo. Florece desde el mes de enero en climas suaves, con el pico de floración en marzo-abril. 'Sweet Jane' produce una gran cantidad de flores dobles, en dos tonos de rosa, con un diámetro de aproximadamente 3-4 cm. Sus hojas jóvenes están teñidas de bronce cobrizo, luego, al madurar, adquieren un tono verde claro. Miden de 5 a 7 cm de longitud y son ligeramente brillantes en la parte superior. Resistente hasta -12°C, esta variedad se cultiva a media sombra o a pleno sol, protegida de los vientos fríos. Prefiere suelos ácidos, ricos en humus, frescos y ligeros.

Plante el Camellia 'Sweet Jane' en un seto bajo de estilo campestre, o en un macizo de tierra de brezo junto con azaleas, Skimmia, Membrillero de flor y brezos. Plántelo en otoño con algunas bulbosas de primavera: tulipanes y narcisos para una magnífica escena llena de color. Su tamaño compacto también le permite ser cultivado en maceta durante muchos años. Instálelo en terraza semisombreada, junto a una pared, protegido de los vientos fríos y secos.

El nombre de Camellia fue atribuido a la planta en 1735 por el naturalista sueco Carl Von Linné, en homenaje a Georg Josef Kamel (latinizado como « Camellus »), boticario al servicio de los Jesuitas en Filipinas a finales del siglo XVII. No fue hasta 1792 que el Camellia llegó a Europa.