Camellia japonica Bokuhan

El Camelia 'Col china' es una antigua variedad japonesa que merece ser redescubierta. Concentra en sus pequeñas flores de anémonas rojas y blancas todo el refinamiento de los camelios japoneses de otra época. Desde el mes de enero, produce una abundancia de pequeñas flores refinadas y contrastadas que muestran un pequeño corazón con volantes blancos sobre una corola de pétalos de un rojo sangre brillante, realzados por un hermoso follaje brillante, de un verde oscuro. El crecimiento lento y el desarrollo moderado de este camelia lo convierten en un excelente candidato para los pequeños jardines y el cultivo en maceta. Muy resistente, este camelia prefiere la media sombra, los suelos ácidos y ligeros y los climas húmedos. 

Camellia 'Col china', introducido en Japón en el siglo XVIII, pertenece a la familia de las teáceas, al igual que su ancestro el Camellia japonica. Es un arbusto de crecimiento muy lento, de porte tupido y erecto, con raíces profundas, que alcanzará aproximadamente 1 m 20 de altura y 80 cm  de envergadura a los 10 años en buenas condiciones de cultivo. De febrero a marzo, produce numerosas flores de tipo anémona de pequeño tamaño, midiendo 5 a 7 cm de diámetro. Están compuestas por un corazón donde se juntan numerosos pétalos blancos apenas tocados de rosa, en el centro de una corola de 7 a 8 pétalos rojos y brillantes. Los estambres son poco visibles en el centro de la flor. Su follaje, persistente, está compuesto por grandes hojas elípticas, de 6,5 a 8 cm de longitud por 4,5 a 5,5 cm de ancho, finamente dentadas en el borde, coriáceas, de color verde oscuro y brillantes en el haz. Aunque este arbusto es resistente hasta -15ºC en suelo abierto, su floración podría verse comprometida por la nieve, el viento helado y temperaturas inferiores a -5ºC.

El camelia japonés 'Col china' aprecia los climas templados y húmedos y se desarrolla mejor en regiones costeras, en suelos ácidos, húmedos y bien drenados. En cuanto a la exposición, aceptará pleno sol en climas favorables, como en las regiones atlánticas, pero es a media sombra, protegido del sol abrasador y resguardado de fuertes vientos, donde dará lo mejor de sí mismo. En el jardín, por ejemplo, lo colocarás en un macizo de arbustos, junto con otras plantas acidófilas como los Rododendros,  Azaleas, el Cornus Kousa , arces japoneses o el Kalmia Latifolia. Pero sería una lástima sumergir esta variedad original en un revoltijo de follaje o flores. Merece un lugar destacado, cerca de la entrada de la casa, o en una hermosa maceta en la terraza, para resguardar en invierno en climas muy fríos.