Camellia japonica Holly Bright

El Camelia 'Holly Bright' es una variedad de camelia japónica bastante reciente, única por su follaje persistente ondulado y dentado en el borde que recuerda al del acebo.  Su floración invernal, que se asemeja a la de las peonías, no carece de encanto: sus grandes flores semi-dobles son de color rojo salmón brillante, bellamente arrugadas y realzadas por estambres dorados. Vigoroso, con un porte erguido pero compacto, este arbusto puede ser cultivado en una maceta grande en la terraza o balcón durante muchos años. En el suelo, aportará mucha alegría en los alrededores de la casa, mientras el jardín aún está dormido. 

El Camellia 'Holly Bright', introducido en 1985 en EE.UU., pertenece a la familia de las teáceas. Es un arbusto de porte tupido, erguido y denso, con raíces profundas, que alcanzará aproximadamente 1 m 20 de altura y 70 cm de envergadura a los 10 años. En su madurez, a los 15 a 20 años, puede alcanzar 1 m 50 de altura y 1 m de envergadura en buenas condiciones de cultivo. De febrero a abril, más temprano o tarde dependiendo del clima, ofrece numerosas y grandes flores semi-dobles, de 11 cm de diámetro, con pétalos sedosos, finamente venosos y ligeramente arrugados que revelan un centro adornado con estambres amarillos en plena floración. Su follaje persiste en invierno, las grandes hojas elípticas miden de 10 a 12 cm de longitud, son coriáceas, de color verde oscuro y con un brillo en la superficie. El borde de la lámina foliar es ondulado y recortado en finas dentadas. Aunque este arbusto es resistente hasta -15°C en el suelo, su floración puede ser comprometida por la nieve, el viento helado y temperaturas inferiores a -5°C.

El Camelia japonica 'Holly Bright' prefiere los climas suaves y húmedos, y prospera en regiones costeras, en suelos ácidos, húmiferos y bien drenados. En cuanto a la exposición, tolerará pleno sol en climas favorables, como en las regiones atlánticas, pero es a media sombra, protegido del sol abrasador y resguardado de vientos fuertes donde mostrará lo mejor de sí mismo. En el jardín, se puede plantar en un macizo de arbustos, junto a otras plantas acidófilas como los Rododendros,  Azaleas, el Cornus Kousa, Avellano mágico, Andrómeda, o también el Kalmia Latifolia. Pero los camelios merecen un lugar especial, aislados cerca de la entrada de la casa, o en una bonita maceta en la terraza, para resguardarlos en invierno en climas fríos.