Carpinus fangiana - Carpe

El Carpinus fangiana es una especie china que forma un árbol de porte elegante, de tamaño modesto, con corteza gris. Presenta tallos marrón violáceos, que contrastan maravillosamente con su inmenso follaje caduco, compuesto por hojas jóvenes bronce, que luego se vuelven verde oscuro, y su excepcional floración primaveral, en largas brácteas colgantes, amarillo pálido, de hasta 50 cm de largo. ¡Un árbol único para descubrir absolutamente!

El Carpinus fangiana, también llamado Carpe de Fang o Carpe de cola de mono, es un árbol caducifolio, originario del oeste de China y perteneciente a la familia de las Betuláceas. Generalmente forma un gran arbusto de 5 a 10 m de altura, pero en condiciones ideales de cultivo, cálidas y húmedas como en su hábitat natural, puede alcanzar los 20 m de altura. Su tronco está cubierto de una corteza gris-marrón a gris oscuro. Sus ramas son marrón violáceas y lisas. Está dotado de grandes hojas lisas, bronceadas en estado joven, luego verde oscuro, con numerosas nervaduras laterales, lanceoladas y finamente dentadas, largas y elegantes, de hasta 30 cm de largo. En mayo-junio, produce espigas masculinas de 6 cm de largo, y extraordinarias espigas femeninas, amarillo-verdosas, colgantes, que pueden alcanzar una longitud de 50 cm, con un diámetro de 3 a 4 cm. Esta espectacular fructificación femenina está formada por brácteas, superpuestas en espiral a lo largo de la espiga, de donde su parecido con una cola de mono. Los frutos maduran de julio a septiembre.

El género Carpinus es un nombre latino compuesto por dos palabras de origen celta, karr, que significa madera, y penn, cabeza, en referencia al uso de la madera de Carpe para la fabricación de yugos para el enganche de bueyes. El nombre específico de este Carpe chino, fangiana, le fue otorgado en honor a Wen-Pei Fang (1899-1983), eminente botánico chino, especialista en Acer y Rhododendron chinos.

Este Carpe de cola de mono, árbol de gran belleza, tanto por su hermoso follaje con grandes hojas verde oscuro, como por sus notables espigas amarillo-verdosas, requiere una ubicación a media sombra, o al sol no abrasador, en suelo fresco. Idealmente se colocará aislado en un césped, o se integrará en un grupo arbustivo. Puede asociarse con árboles y arbustos, como un Arce japonés, un Árbol sagrado, un Avellano retorcido, o incluso un Hamamélis.