Cornus kousa Samaritan

El Cornus kousa Samaritan, es un espléndido pequeño árbol caducifolio, de hermoso porte, robusto, vigoroso, muy resistente a enfermedades, y con extraordinarias cualidades ornamentales¡ Exhibe un notable y luminoso follaje variegado, con hojas onduladas, de un hermoso verde marginado de crema, que se colorean en otoño, con tonos flamantes rosados y burdeos. Su tronco muestra una hermosa corteza con grietas. Muy florífero, se adorna en mayo-junio con una multitud de elegantes brácteas de flores blanco-verdosas, luego cremosas, muy puntiagudas, seguidas de pequeños frutos carnosos rojos. ¡Un arbusto extremadamente decorativo, con colores atractivos, desde la primavera hasta el otoño! ¡Espectáculo garantizado casi todo el año!

El Cornus kousa, originario de China, Japón y Corea, pertenece a la familia de las Cornáceas. El Cornus kousa Samaritan, obtención reciente, es un pequeño árbol de silueta cónica y porte extendido, con ramas inferiores escalonadas. Su tronco presenta una corteza agrietada. De crecimiento medio, alcanza los 4 a 6 m de altura con una extensión de 3 a 4 m. Posee un espléndido follaje caducifolio variegado, muy denso, compuesto por hojas estrechas, ovales y puntiagudas, con bordes ondulados, de un verde intenso, bordeadas de blanco-crema, y de 5 a 8 cm de longitud. En otoño, su follaje resplandece con espectaculares tonos rosados y púrpura carmesí oscuro. De mayo a junio, se cubre de diminutas flores verdes, de 0,5 a 1 cm de diámetro, agrupadas en racimos, cada una rodeada de cuatro brácteas de 3 a 5 cm de longitud, muy puntiagudas, blanco-crema, que se tornan rosadas con el tiempo. A finales de verano, las flores se transforman en pequeños frutos carnosos, esféricos, sostenidos por un largo pedúnculo, de color rojo y semejantes a fresas.

Este Cornus kousa, de bajo mantenimiento, particularmente resistente a enfermedades y bien tolerante al calor y al frío, prefiere un suelo fértil, fresco a húmedo, bien drenado, más bien ácido. Le conviene una ubicación soleada, así como sombra parcial. Esta variedad es prodigiosamente ornamental durante todo el año, gracias a su magnífico follaje verde matizado de blanco, su abundante floración, su original fructificación roja y sus espléndidos tonos otoñales. Se adapta bien a los pequeños jardines, por su desarrollo relativamente contenido y su porte equilibrado. Este Cornus de flores Samaritanas puede ser plantado al sol, pero es en una situación semisombreada donde el carácter luminoso de su follaje variegado se realzará mejor. Será perfecto en el frente o en el segundo plano de un macizo de tierra ácida, junto a Hortensias, Rododendros, arbustos de floración estival y/o de follaje colorido. Colocado en primer plano, bajo la protección de árboles grandes, su magnífico follaje jaspeado iluminará de manera espectacular los follajes perennes verde oscuro. Se combinará muy bien con Arces japoneses, un Árbol de las Anémonas o incluso Magnolias.