Cotoneaster dammeri Schoon

El Cotoneaster dammeri ‘Schoon’ es un cultivar de Cotonéaster de Dammer apreciado por su fructificación abundante en pequeñas bolas rojo vivo, decorativa a partir de octubre. El arbusto presenta un porte denso, rastrero y fuertemente tapizante y grandes hojas persistentes verde oscuro brillante, más grandes que las de la especie tipo. De una vigor excepcional, forma un cubresuelos de 30 cm de altura por 2 m de envergadura perfectamente adaptado para embellecer los grandes espacios y los taludes. En junio, produce muchas flores blancas simples muy melíferas. Sin exigencias, se adapta a todas las exposiciones y a todos los suelos, incluso secos y calcáreos.

El Cotoneaster dammeri pertenece a la gran familia de las Rosáceas y es originario del centro y oeste de China. Este arbusto muy vigoroso es capaz de resistir sequías marcadas pero también inviernos muy crudos, incluso cuando crece en un suelo pobre y pedregoso. Muestra una clara preferencia por los suelos drenados y pobres. El cultivar ‘Schoon’ tiene un porte extendido con ramas flexibles, largas y muy rastreras de color rojizo. Su crecimiento es bastante rápido, alcanzará a madurez aproximadamente 30 cm de altura por 2 m de envergadura y más ya que sus ramas se enraízan naturalmente. Su follaje persistente está compuesto por grandes hojas gruesas y coriáceas. Son de un verde muy oscuro y brillante. La floración ocurre en junio, en forma de pequeñas flores de 5 pétalos blancos entremezclados de rosa, bastante típicas de las Rosáceas. Esta floración da paso a frutos carnosos de 5 a 7 mm de diámetro, de un rojo vivo, muy apreciados por las aves. 

El cotonéaster dammeri ‘Schoon’ es ideal para cubrir grandes superficies en las zonas difíciles del jardín a las que aporta un toque muy cuidado. En condiciones secas y cálidas, plántelo en grupos con otras especies de cubresuelos como cistes y romeros rastreros, intercalados aquí y allá con flores amarillas de hipéricos. Aunque acepta crecer en casi cualquier condición, será más fructífero al sol. Perfecto al pie de un gran seto o en un rincón sombrío y desnudo del jardín, por ejemplo bajo un gran árbol, también se puede plantar en una rocalla para rellenar los espacios entre otras plantas. Plántelo sin dudarlo en un gran talud, sobre un muro o un murete de contención, en el borde de la terraza o de un camino. Se puede asociar, por ejemplo, con el enebro rastrero Blue Star, el Euonymus fortunei Emerald Gaiety y el Forsythia intermedia 'Marée d'Or'. Resistente a la salinidad, en climas marítimos puede ir acompañado de brezos del Oeste y ceanothus persistentes.