Escallonia Red Dream

El Escalonia 'Red Dream' es una obtención hortícola híbrida que se distingue por un porte bajo, tupido y muy denso. Los escalonias, excelentes plantas de jardín en climas suaves, pertenecen a la familia de las escaloniacéas y son originarios de las zonas templadas de América del Sur y de Chile. En la naturaleza, estos arbustos crecen entre la maleza que cubre las laderas o en las costas expuestas a las salpicaduras del mar.

El arbusto forma una cúpula redonda, ramificada con un porte muy arbustivo, de crecimiento moderadamente rápido a bastante lento, que no superará los 80-90 cm de altura a la madurez y 1 m 10 de envergadura. Los brotes jóvenes de esta variedad nacen púrpuras y luego se vuelven verdes al desarrollarse. Sus hojas perennes, de 2,5 cm de longitud, son coriáceas, alternas, ovales, con bordes dentados, de un verde medio brillante. Están implantadas de manera muy densa, más hacia la parte terminal de las ramas. La floración tiene lugar de junio a agosto, durante aproximadamente dos meses, más temprano o más tarde según el clima, a veces desde mayo en climas cálidos. A veces se produce una segunda floración en septiembre-octubre. En el extremo de algunas ramificaciones nace un corto racimo compuesto por pequeñas flores de cinco pétalos, en forma de campanillas tubulares de color rosa carmín con garganta blanca, envueltas en la base en un cáliz púrpura.

Los Escallonias reemplazan ventajosamente a las Veigelas en climas suaves, en la costa y en jardines secos o sin riego. 'Red Dream' forma un hermoso cubresuelos en la parte delantera de los macizos arbustivos. Su pequeña estatura es adecuada para jardines de tamaño modesto, así como para el cultivo en macetas para embellecer terrazas y balcones. Bien conocido por los jardineros bretones, irlandeses o ingleses, el Escalonia también se desenvuelve bien en climas mediterráneos, después de una plantación cuidadosa y un riego regular durante los dos o tres primeros años. No teme ni el calor, ni los veranos secos una vez establecido, ni los suelos ligeramente calcáreos, y logra florecer incluso en lugares soleados o, por el contrario, sombreados. Es indispensable en jardines costeros: su floración, al igual que la de los Olearias, alegra el follaje gris de los Atriplex, el Bupleurum fruticosum o la Correa alba rosea, por ejemplo. En un macizo, se puede combinar con cistos, Polygala, Indigofera, Grevillea (en suelo neutro a ácido) o incluso con arbustos de floración primaveral como los císteos persistentes y compactos, los retamas (Cytisus scoparius), un Loropetalum chinense ...