Magnolia Elisabeth

El Magnolia Elisabeth necesita unas horas de sol directo, por lo que cultívelo al sol o en media sombra pero no en total sombra. Manténgalo protegido de los vientos fríos. Plántelo en un suelo fresco, rico, profundo, drenado y preferiblemente neutro o en tierra de brezo. En suelo calizo, haga un gran hoyo de plantación y añada tierra de brezo mezclada con su tierra de jardín. Sin embargo, es menos sensible al calizo que la especie tipo. Ponga mantillo alrededor del Magnolia para evitar que se congele en caso de fuertes heladas primaverales, especialmente los jóvenes plantones. Riegue en caso de sequía. Cuando crezca, el riego por la lluvia será suficiente. De febrero a junio, antes de la vegetación, elimine la madera muerta o enferma, así como las ramas que se entrecruzan. Pode poco a poco para darle forma, las ramas crecen desde la base de la planta.