Physocarpus opulifolius Magic Sweet Cherry Tea

El Physocarpus opulifolius Magic Sweet Cherry Tea es una variedad de Physocarpus con hojas de Albaricoquero particularmente atractivas por su vegetación baja y compacta, bien adaptada a los Pequeños jardines. Este pequeño arbusto es decorativo tanto por su follaje, sus flores y sus frutos. Las jóvenes hojas rojo anaranjado se vuelven púrpuras en temporada, mientras que los botones florales rosa oscuro se abren en corimbos rosa claro en primavera, con una floración intermedia en verano. ¡Frutos decorativos rosados casi rojos complementan este espectáculo permanente! Muy resistente, tanto en un lecho variado como en una maceta, este Physocarpus crecerá al sol o en Media sombra, en suelo ácido a neutro no demasiado seco.

El Physocarpus opulifolius Magic Sweet Cherry Tea pertenece a la gran e importante familia de las Rosáceas, que nos brinda tantas especies ornamentales (Rosas, por supuesto, pero también Fotinia, Cotoneaster, Amelanchier...) así como la mayoría de nuestros árboles frutales de clima templado (Peral, Manzano, Guinda, Durazno, Albaricoquero, Ciruelo...), sin olvidar numerosas plantas silvestres en nuestros campos y bosques. La especie tipo Physocarpus opulifolius es originaria del este de los Estados Unidos, y se extiende hasta Quebec y Manitoba. Es un arbusto de tamaño moderado (1 a 3 m de alto) y que se adapta a una amplia gama de condiciones edáficas (tipos de suelos) y climáticas. Además, es una especie muy resistente, no es sorprendente que haya dado muchas variedades ornamentales dadas sus cualidades de robustez. Magic Sweet Cherry Tea es una de las últimas incorporaciones al mercado, en 2021, y se distingue por sus numerosas cualidades ornamentales. Es una variedad particularmente compacta, no superando 1 m a 1,20 m en todos los sentidos, lo que permite cultivarla no solo en suelo abierto, sino también en una maceta para embellecer un balcón o una terraza. Su vegetación es densa y ramificada, con un porte muy erguido que no se abre y permanece bien agrupado y compacto. Sus bonitas hojas recortadas y dentadas tienen un color rojo anaranjado después de brotar en primavera, y al llegar a la madurez, pasan gradualmente a púrpura. En primavera, este pequeño arbusto produce botones florales rosa oscuro, que luego se abren en pequeñas flores rosa claro, nectaríferas y visitadas por las abejas, reunidas en corimbos de unos 5 cm de diámetro. Esta bonita floración luego vuelve en verano, y al evolucionar a una fructificación rosa oscuro a rojo muy decorativa (y apreciada por los pájaros en otoño), este Physocarpus presenta una sucesión de escenas ornamentales durante toda la temporada de crecimiento. Muy resistente, hasta aproximadamente -28°C, este pequeño arbusto es fácil de cultivar en la mayoría de los suelos, preferiblemente no calcáreos, incluso húmedos siempre que estén drenados. De hecho, prefiere lo fresco a lo seco, pero una vez bien enraizado, puede soportar episodios de sequía. El follaje sufrirá, pero la cepa resistirá. Obviamente, en este caso es preferible regar un poco para seguir disfrutando del espectáculo de su follaje...

El Physocarpe 'Magic Sweet Cherry Tea', muy compacto, encontrará su lugar en lechos, o en un seto bajo, al igual que en una bonita maceta en una terraza. En los pequeños jardines, permitirá formar lechos variados de dimensiones reducidas, junto con otros arbustos compactos como el Caryopteris Hint of Gold, con follaje aromático dorado en primavera, y una hermosa floración azul malva en verano. La Spiraea cinerea Grefsheim, cuyas ramas se cubren de flores blancas en primavera, también será una buena compañera, al igual que el Lagerstroemia indica Houston, una variedad enana de Árbol de Júpiter con una deslumbrante floración rosa oscuro durante todo el verano. Y para disponer de vegetación en invierno, plante a sus pies el Helleborus sternii Flame, una variedad que ama el sol y cuyas hojas persistentes están adornadas de febrero a abril con un ramillete de flores rosas de tonos cambiantes. El nombre del Physocarpus opulifolia proviene del griego 'phusa', que significa burbuja de aire o vesícula, y 'karpos', que designa la fruta, en referencia a la forma del fruto. El parecido de su follaje con el del Viburnum opulus le valió su nombre específico "opulifolius". Introducido en Europa alrededor de 1687, los numerosos cultivares brillantes que se han creado en los últimos años han permitido su regreso triunfal a los jardines.