Andromeda polifolia Blue Ice - Romero de pantano

El Andrómeda polifolia Blue Ice, también conocido como Madroño o aún Romero de las turberas, es un arbusto compacto y tupido realmente decorativo por su follaje persistente de color azul plateado que recuerda al romero y que sirve de marco a una larga floración en encantadores racimos de campanillas rosadas. Se cultiva como un azalea japonesa, en macetas en la terraza, en una rocalla fresca, o en un macizo de tierra de brezo, preferiblemente a media sombra. 

El Andrómeda polifolia Blue Ice pertenece a la familia de las ericáceas, al igual que los brezos, los rododendros y los Madroños. Es una selección hortícola canadiense que presenta un follaje más plateado y azulado que el tipo silvestre. Este último, incluido en la lista de especies protegidas en Francia, es un pequeño arbusto que crece naturalmente en los pantanos turbosos de nuestras montañas, a altitudes medias. El cultivar 'Blue Ice' tiene un porte extendido y redondeado, en cojín. De crecimiento lento, alcanza finalmente unos 30 cm de altura por 40-50 cm de envergadura. El arbusto desarrolla ramas delgadas, erectas, con hojas coriáceas, delgadas, ligeramente enrolladas en el borde, puntiagudas, midiendo de 1 a 3 cm de largo. Su color en primavera es un azul plateado, luego se tornan azul verdoso en verano. La planta florece de abril a junio. En el extremo de los tallos aparecen pequeños racimos compuestos por 2 a 8 flores colgantes en forma de urna, de un bonito rosa vivo, que se asemejan a las de los Madroños. Cada flor mide menos de 1 cm de largo. El fruto es una cápsula globulosa de color rosa que se vuelve negra a principios de otoño. Colores que resaltan bien sobre el follaje.

El Madroño 'Blue Ice', muy resistente al frío, poco propenso a enfermedades, es una planta sin embargo exigente en cuanto a suelo, exposición y clima. Si tiene éxito con las azaleas japonesas, los rododendros y los arándanos, este arborito prosperará en su jardín. Se cultiva bastante fácilmente en macetas, en tierra ácida y húmeda, con riegos con agua no calcárea, sin sol ardiente. Este pequeño arbusto se planta en las rocallas alpinas semisombreadas con coníferas enanas de porte prostrado y erecto, por ejemplo. Úselo también para formar bordillos azulados en el borde de sus arriates o para crear masas coloridas en las zonas más húmedas del jardín. Acompaña a otros arbustos de tierra de brezo como los kalmias, Andrómedas, rododendros y otras azaleas.