Pieris japonica Forest Flame - Andrómeda

El Pieris 'Forest Flame' es una de las variedades más famosas de Andromeda del Japón. Debe su reputación a su gran resistencia, facilidad de cultivo en suelos no calcáreos, y también a su hermoso follaje persistente que cambia de color a lo largo de las estaciones. Esta variedad destaca por su joven follaje rojo que luego se vuelve rosa coral para finalmente tornarse verde en verano, así como por su floración temprana y nectarífera a principios de primavera, que recuerda un poco a grandes racimos de muguet blanco. Se puede plantar a media sombra, e incluso a la sombra, en un seto mixto y colorido, como fondo para un macizo de tierra de brezo, o incluso en una gran maceta en la terraza.

Los Pieris pertenecen a la familia de las ericáceas, al igual que los brezos y los rododendros. Son arbustos de tierra de brezo de crecimiento lento, con follaje persistente cuyos nuevos brotes adquieren tonos rosados o cobrizos, acompañados de una hermosa floración en racimos colgantes de pequeñas campanillas. Prefieren un suelo ligero, fresco y ácido, e incluso ocasionalmente seco, y una exposición a media sombra o soleada, siempre y cuando no sea un sol abrasador. El Pieris japonica o Andromeda del Japón es originario del sur de Japón, de las montañas del sureste de China (de 800 a 1900m de altitud), y de Taiwán. Las variedades derivadas del Pieris japonica son bastante resistentes una vez establecidas.

La variedad de Andromeda del Japón 'Forest Flame' presenta un porte denso, ligeramente erecto, alcanzando aproximadamente 1.50m de altura por 1.25 m de envergadura a la madurez. En primavera, sus nuevos brotes en los extremos de las ramas son rojos, palidecen rápidamente a rojo claro o salmón, para luego tornarse rosados y finalmente verdes con un toque amarillo. Sus hojas, bellamente lustrosas, dentadas y puntiagudas, de forma lanceolada, miden aproximadamente de 3 a 10cm de longitud. La floración de blanco puro, ligeramente perfumada, compuesta por racimos colgantes de 5 a 12cm de longitud, adornados con pequeñas urnas, es precedida por botones muy decorativos en invierno. Ocurre de marzo a abril. Cabe destacar que la exposición soleada es inversamente proporcional a la floración.

De crecimiento lento, 'Forest Flame' no requiere poda, apenas necesita mantenimiento y se adapta perfectamente a los pequeños jardines, combinado con arbustos de suelo ácido persistentes o caducos de tamaño mediano, que al igual que él, prefieren la luz tamizada y suelos no calcáreos: Sarcococca, Loropetalum, Myrsine africana (en climas suaves), boj, camelias de otoño, hortensias, Cornus kousa y Clethra, la elección es amplia. También se cultiva muy bien en una maceta grande que se coloca en una ubicación sombreada, en un rincón de la terraza. Se combinará de forma natural con los Rododendros, rodeado de un macizo de helechos, helleborus y Pernettya.