Pittosporum tenuifolium Golden Ball

El Pittosporum tenuifolium 'Golden Ball', mutación natural del cultivar 'Golf Ball', es una variedad de pittosporum de pequeñas hojas particularmente compacta y luminosa. En este pequeño arbusto redondo y denso en follaje conviven hojas jóvenes teñidas de amarillo y hojas maduras de un verde ácido, brillantes bajo el sol. Más decorativo que el boj y menos sensible a enfermedades, es como él decorativo todo el año, soporta bien la poda y ofrece a finales de primavera una floración discreta, que exhala por la noche un perfume a miel. Su único punto débil es una rusticidad limitada, que limita su cultivo en suelo abierto a nuestras regiones templadas. Plántelo en una rocalla soleada, invítelo a un jardín seco, tolera bien la sequía estival y los suelos calcáreos. En nuestras regiones frías, exponerlo en una maceta grande en la terraza o el balcón, para protegerlo en climas fríos.

El Pittoporum tenuifolium, de la familia de las Pittosporáceas, es originario de regiones secas situadas al este de los Alpes de Nueva Zelanda. El cultivar 'Golden Ball', obtenido en Nueva Zelanda en 2008, proviene directamente de 'Golf Ball', del cual hereda el mismo porte globular y muy compacto.

De crecimiento bastante rápido,forma en pocas temporadas un arbusto denso y rechoncho de 50 a 80 cm en todas direcciones, a veces hasta 1 m. Sus tallos muy ramificados llevan hojas que persisten todo el año, incluso en invierno. Nacen amarillas bordeadas de verde, luego cambian gradualmente a un verde particularmente claro y brillante, creando a escala del arbusto un interesante contraste. Son hojas alternas, enteras, ovales, gruesas, muy brillantes, coriáceas, con bordes lisos. Son pequeñas, no superan los 3 a 3.5 cm de longitud por 1.5 cm de ancho. La floración ocurre a finales de primavera o principios de verano. Las pequeñas flores en copas oscuras, de menos de 1 cm de diámetro, destilan un perfume sobre todo perceptible por la noche. Son seguidas por la formación de algunos frutos redondos primero verdes y luego casi negros al madurar. Después de un invierno un poco riguroso que aniquilará toda o parte de la vegetación, la planta puede volver a crecer desde la cepa o la base de las ramas, después de una poda más o menos severa según el caso.

Rústico hasta -7C°/-10°C, el Pittosporum Golden Ball requiere un suelo muy bien drenado, una ubicación cálida, soleada y protegida de los vientos dominantes. En clima suave, se planta en rocalla o en bordes de macizos. En un jardín seco, acompaña a los cistes, lavandas, oréganos o incluso a los tomillos. En regiones frías, se instalará en maceta en una terraza para disfrutar de su delicado perfume y su encanto redondeado. Esta variedad, al igual que el boj, también puede formar un seto pequeño de aspecto muy cuidado y se presta bien al arte topiario, pero tiene la ventaja de estar libre de enfermedades, a diferencia de este último, diezmado en algunas regiones. Acompáñelo también con salvias arbustivas rojas o fucsias, Prostanthera, Westringia, grevilleas, escallonias compactas o combínelo con los follajes plateados de las artemisas y las santolinas.