Potentilla fruticosa Hopley's Orange

El Cincoenrama leñoso Hopley’s Orange es un pequeño arbusto tupido y compacto, con follaje caduco, fino, denso y cubriente, de color verde azulado, cuya generosa floración naranja brillante, que luego se vuelve dorada, coloreará magníficamente jardines y balcones ¡todo el verano hasta el otoño! ¡Un encantador arbusto florecido, ideal para jardineros aficionados!

Originaria del Hemisferio norte y de la familia de las rosáceas, la cincoenrama leñosa Hopley’s Orange es un arbusto de pequeño tamaño, que mide de 80 cm a 1 m de altura y de ancho. Forma un matorral de porte bajo y compacto, con numerosas ramas basales muy ramificadas. Su follaje caduco está compuesto por hojas de 3 cm de largo, pinnadas y con folíolos estrechos, de color verde azulado que se tornan amarillo parduzco en otoño. Este follaje, elegantemente recortado, está cubierto de una pilosidad blanca, que le confiere un aspecto sedoso y plateado. Sus flores delicadas, parecidas a las de los rosales de flores simples, son en forma de copas de 3 cm de diámetro, de cinco pétalos y con estambres dorados. La abundante floración, que comienza en mayo/junio y termina con las primeras heladas, si el otoño es suave, es de color naranja brillante, volviéndose más amarilla en pleno verano. Es importante mencionar que la floración es más intensa a principios del verano y pierde algo de vigor a lo largo de la temporada.

Esta cincoenrama leñosa Hopley’s Orange, de cultivo muy sencillo, aprecia estar ubicada en una situación muy soleada, sin ser abrasadora, o semisombreada, y en un suelo ordinario muy bien drenado.

Al sol, las cincoenramas ofrecerán flores de color deslumbrante, a semisombra, el color será un poco menos intenso. Plantas sin problemas, generosamente floríferas y muy bellamente coloreadas, las cincoenramas son ideales para alegrar el jardín o el balcón, duraderamente y sin esfuerzo. Con su aire de rosal silvestre y sus exigencias muy modestas, pueden ser utilizadas de múltiples maneras: en macizos florales, rocallas, bordillos, setos bajos, macetas…

Colocándolas en primera fila de tus parterres, serán perfectas para obtener rápidamente macizos florales deslumbrantes de color, dignos de un cuadro de Vincent Van Gogh o Claude Monet. Quedarán muy bien acompañadas de Dalias, Iris germanica, Aquileas, Rosales, Rudbeckias. Se asociarán idealmente con plantas mediterráneas (Lavanda, Romero, Jara, Hinojo, Pittosporo), para una atmósfera cálida y perfumada. Para una escena muy gráfica, su porte compacto se combinará perfectamente con plantas de aspecto más esbelto o despeinado (Phormiums, Gramíneas, Euforbias, Chispas). En un talud o una rocalla, donde estarán idealmente ubicadas si tu tierra de jardín es pesada y arcillosa, mezclarlas con Coníferas enanas o rastreras, Ceanotos rastreros, Rosales paisajistas, Geranios vivaces. Su cultivo en maceta en un balcón o terraza también les conviene muy bien, debido a su tamaño reducido: unirlas con Lavandas, Tomillos, Juníperos rastreros, Ipomeas.

Anécdota:

Esta variedad fue galardonada con un Award of Garden Merit en 2002, que corresponde al premio máximo del mundo vegetal otorgado por la Real Sociedad de Horticultura.