Potentilla fruticosa White Lady

La  Cincoenrama leñoso 'White Lady' es una variedad de cincoenrama leñoso reciente, notablemente florífera y luminosa. Con porte semiextendido, este arbusto forma un denso domo de follaje verde grisáceo sobre el cual florecen en oleadas sucesivas una multitud de pequeñas flores en copas de un blanco puro con corazón amarillo. Fácil de cuidar, resistente y robusto, que requiere poco mantenimiento, este arborito cubresuelos y caduco se adapta en todas partes, en macizos y bordillos, pero también en grandes macetas en la terraza. Es una planta sumamente gratificante, en flor de junio a octubre y casi infalible en suelo drenado.

La Potentilla fruticosa es un arborito leñoso que pertenece a la familia de las rosáceas, al igual que las rosas. La variedad 'White Lady' es un arborito caduco particularmente resistente que tiene un porte tupido, semiextendido y una vegetación densa. En su madurez, la planta medirá aproximadamente 90 cm en todos los sentidos. Sus ramas delgadas y ramificadas desde la base, marrones, se desescaman con la edad, llevan un follaje caduco. El pequeño tamaño de las hojas divididas en folíolos estrechos le da una hermosa ligereza a la silueta verde oscuro. Una ligera pilosidad blanca en el envés de las hojas le confiere un aspecto sedoso y ligeramente ceniciento. Sus delicadas flores son en forma de copas de 3 cm de diámetro, con  cinco pétalos blanco puro y estambres dorados. La abundante floración, que comienza en junio y termina con los primeros fríos, suele ser más intensa al principio del verano, luego vuelve regularmente durante la temporada, dependiendo de la frescura del suelo.

Al sol, las cincoenramas ofrecerán flores con colores más brillantes, a media sombra, el color será un poco menos intenso. Plantas sin preocupaciones,  generosamente floríferas y muy fáciles de integrar en todo tipo de jardín, las cincoenramas son ideales para alegrar los macizos y los balcones de manera duradera y sin esfuerzo. Con su aspecto de rosal espinosísimo y sus exigencias muy modestas, pueden ser utilizadas de múltiples formas e instaladas en todas partes: en macizos floridos, rocallas, bordillos, setos bajos, macetas... Bajo la mayoría de nuestros climas y en todo suelo bien drenado.

Serán muy efectivas en compañía de Dalias, Iris germanica, Aquileas, Gauras, Perovskias, lino azul, achicoria salvaje. Se combinarán de manera ideal con plantas mediterráneas (Lavanda, Romero, Jara, Hinojo, Helychrisum, Teucrium), para un ambiente cálido y perfumado. Para crear una escena muy gráfica, se pueden mezclar con plantas de porte más esbelto o despeinado (Phormiums, Gramíneas, Euforbias). En una ladera o una rocalla, donde estarán idealmente ubicadas si su tierra de jardín es pesada y arcillosa, se mezclarán con Coníferas enanas o rastreras, Ceanothus rastreros o Rosales cubresuelos y paisajistas.