Rhododendron impeditum Moerheim

El Rododendro 'Moerheim' es un cultivar enano, frondoso, muy florífero, muy resistente, galardonado en Inglaterra con un Award of Garden Merit otorgado por la Royal Horticultural Society (RHS) en 1993. Su floración primaveral, de una increíble generosidad y gran frescura, se presenta en forma de pequeños ramos en un tono azul malva realzado con cáliz y estambres rosados. Por su porte compacto, su hermoso follaje persistente que se vuelve bronceado con el frío y su deliciosa floración, 'Moerheim' se impone como uno de los más bellos arbustos de tierra de brezo para la terraza o los espacios pequeños. Los rododendros requieren, para expresarse plenamente, un suelo ligero, fresco, libre de caliza y un clima húmedo.

Proveniente del cruce entre varias especies incluyendo el Rododendro impeditum, el Rododendro 'Moerheim' es una planta de la familia de las ericáceas, casi exclusivamente ligada a suelos ácidos. Se trata de una variedad compacta, de porte frondoso y muy ramificado, ligeramente extendido, que no supera los 60 cm de altura y 80 cm de envergadura a los 15 años. Las ramas llevan hojas persistentes ovales a elípticas, coriáceas, de un verde oscuro brillante que se torna bronceado en invierno, con pelusa y más claras en el reverso. Su crecimiento es más bien lento para un rododendro, con una vegetación densa y armoniosa y un follaje elegante, lo que le confiere una presencia real en el jardín durante todo el año. Sin embargo, es en abril-mayo cuando destaca gracias a su floración notablemente generosa en un color muy fresco. Las flores en forma de campanillas están agrupadas por 3 o 4 en el extremo de numerosos tallos, sobrepasando la vegetación. Casi blancas en botón, encerradas en un cáliz rosa-púrpura, se abren en un encantador tono azul-lila, aclarándose al desplegarse mientras liberan largos estambres rosados.

Este arbusto compacto será ideal en bordes de macizos o en maceta, siempre que cuente con un suelo y un clima adecuados; ¡los "rhodos" son plantas tan seductoras como exclusivas! Su color azul malva combina bien con los tonos pastel de las hortensias (la elección es amplia, desde blanco hasta rosa, pasando por el azul), los brotes coloridos de los pieris, pero también con toda una gama de tonos rojo-púrpura y granate, como el del follaje del arce japonés 'Atropurpureum' o las flores del Loropetalum chinense 'Fire Dance'. Para una escena de inspiración contemporánea o un jardín de estilo depurado, asócialo más bien con flores blancas y follajes, como por ejemplo un Corazón de María blanco y el follaje del helecho cobrizo (Dryopteris erythrosora).