Salix lanata - Sauce

Salix lanata, el sauce lanudo, es una especie botánica de pequeño tamaño pero muy robusta, originaria de las zonas subárticas del Norte de Europa. Este arbusto compacto y tupido, acostumbrado a climas muy duros y a rocallas alpinas, se distingue por su porte bajo, tupido, extendido y regular, con suave pelusa gris plateada que cubre su follaje joven y sus jóvenes ramas amarillas muy decorativas. Sus grandes amentos masculinos dorados y sus amentos femeninos gris-amarillos bastante espectaculares aparecen en primavera, al mismo tiempo que las hojas. Bien adaptado a los pequeños jardines, y en particular a los climas de montaña, prospera al sol en macizos muy bien drenados y se luce en las grandes rocallas que permanecen frescas. 

Salix lanata pertenece a la familia de las salicáceas. Es una especie botánica caduca originaria de Islandia, las Islas Feroe, el Norte de Escandinavia y el Este de Siberia. También se encuentra en Escocia. Generalmente crece en las laderas rocosas de las montañas, en suelos bastante pobres, entre 600 y 900 m de altitud. La textura, el color y el bonito porte compacto de esta planta, junto con su extrema rusticidad, le han valido la distinción de la Royal Horticultural Society en Inglaterra. Este arbusto de pequeño tamaño y de crecimiento bastante lento desarrolla una estructura regular y ramificada cerca de la base. Muy tupido, se extiende lateralmente con el tiempo, alcanzando 1 m de altura por 1 m 50 de envergadura. Las jóvenes ramas están cubiertas de una corteza amarilla. Con la edad, su ramificación adopta un aspecto nudoso. En esta especie, toda la vegetación joven de primavera está cubierta de una pelusa. El follaje es caduco, las hojas jóvenes están cubiertas de una lana blanca a gris pálido y se vuelven glabras en la madurez. Están dispuestas de forma alterna, de forma redondeada, ligeramente onduladas en el borde, midiendo en promedio 6 cm de longitud. En las hojas maduras, el haz del limbo es de color verde-gris oscuro con un acabado mate. La floración, particularmente ornamental, tiene lugar de abril a junio según el clima, al mismo tiempo que brotan las hojas. Las flores masculinas de este sauce están agrupadas en grandes amentos erguidos sedosos, de 5 cm, de color dorado en la madurez. Las inflorescencias femeninas, muy plumosas, llevadas por sujetos distintos, miden hasta 8 cm de longitud y son de un gris-amarillo pálido sedoso también. Esta floración es apreciada por las abejas que vienen en busca de polen y néctar. Da paso a la formación de cápsulas que se abren en la madurez para liberar semillas provistas de sedas.

Tan encantador en solitario, en macizo como en rocalla,  el sauce lanudo, forjado en una madera nudosa y coronado de grandes amentos que dan ganas de tocar, posee el encanto único y la robustez de las plantas de climas duros. Su hermosa vegetación tupida y plateada se realzará en un entorno sobrio y mineral o en un prado florido. Este arbusto también tiene su lugar en los jardines contemporáneos, a menudo urbanos y de pequeño tamaño. Podar cada tres años después de la floración para fomentar su expansión y producir numerosas ramas florales. Por ejemplo, se puede asociar con plantas perennes y arbustos como la ajedrea de montaña, la amapola de Islandia, el clavel del río amor, el Cytisus purpureus, las Arabis y Alyssum y las campanillas. En un seto libre cuyo suelo bien drenado permanezca fresco, se puede combinar con arbustos de floración primaveral como los almendros en flor, Cytisus scoparius o incluso Berberis púrpuras. Piense en hacer ramos con sus ramas adornadas de amentos sedosos. En un jarrón, se lucen junto con los del Prunus triloba y otros cerezos y ciruelos en flor que el calor del hogar despertará.