Lila Belle de Nancy - Syringa vulgaris

El  Lila 'Belle de Nancy' es una antigua variedad de Victor Lemoine. Se trata de un descendiente muy florífero del Syringa vulgaris, el lila emblemático de los viejos jardines, ya sea en la ciudad o en el campo. Como todo buen lila común, florece en abril-mayo, abundantemente, en forma de opulentos racimos de botones de un malva-rosado púrpura bien apretados unos contra otros. Estos se abren, progresivamente, en floretes semi-dobles de un malva más suave, acompañados de un auténtico perfume de lila. Este arbusto intemporal, imprescindible en primavera, tiene el don de nunca cansar: una vez que su exuberante floración ha terminado, cae sabiamente en el anonimato de un seto, de un gran macizo campestre, desvaneciéndose con modestia en el fondo un tanto desordenado del jardín.

El Syringa vulgaris 'Belle de Nancy' es un arbusto de la familia de las oleáceas, obtenido en 1891 en Nancy por Victor Lemoine. Es el progenitor de variedades muy hermosas como 'Belle de Moscou'. A menudo olvidamos que el lila común, también llamado Lila de Europa, es nativo del sureste de Europa y del oeste de Asia, más precisamente de la península de los Balcanes, y que llegó a Europa occidental a finales del Renacimiento. En la naturaleza, esta planta indomable con flores azul-violáceo-púrpuras muy perfumadas coloniza las colinas rocosas y desafía los inviernos fríos.

La variedad 'Belle de Nancy' forma un arbusto denso, compacto, de porte erguido y redondeado, con una altura de 4m y una envergadura de 3m, en promedio. Forma espontáneamente un arbusto compuesto por varios tallos, como el seringat con el que no debe confundirse. Sus hojas, triangulares y cordiformes, de 4 a 12 cm de largo y 3 a 8 cm de ancho, aparecen en primavera, de un verde medio, con un acabado satinado. La floración tiene lugar en mayo o en abril según el clima. En el extremo de las ramas de un año aparecen, por pares, racimos compuestos, llamados tirso, de 15 a 18 cm de largo. Los botones florales de color púrpura claro se abren en flores malva rosadas, semi-dobles y perfumadas, el conjunto de la inflorescencia, encantador, mezclando estos dos colores. Esta variedad, ligeramente con chupones, a veces produce retoños desde su cepa.

La fuerza que emana de la silueta envejecida de un lila, anclada en múltiples troncos, así como la generosidad de la floración a veces merecen un lugar destacado, aislado, en un pequeño jardín. Envolviéndolo con un parterre de plantas cubresuelos de rosas y nepetas, en un pequeño espacio dedicado a él, este modesto ejemplar se convertirá en un arbusto grandioso, cubierto de gloria en el corazón de la primavera. De cultivo fácil en clima fresco y relativamente regado, incluso en montaña, el Lila común 'Belle de Nancy' se encuentra a gusto en suelos ordinarios, frescos, preferiblemente calcáreos, pero drenantes. Empléelo, mezclado con otras variedades blancas, malvas o rojas, en abundancia, en grandes setos floridos, en compañía de rosas de flores simples, seringats, cornejos, Crataegus Paul's Scarlet, Cotinus o grandes buddleias (B.macrostachya, B.officinalis, B. alternifolia). Un seto de lilas, cerezos en flor, ciruelos de flor, almendros de China, membrillos japoneses y manzanos ornamentales, plantado sobre una gran avenida encajada, es un verdadero encanto en primavera.