Pleioblastus pygmaeus - Bambú

El  Pleioblastus pygmaeus, como su nombre de especie sugiere, es un bambú muy bajo, muy frondoso. Se extiende a través de sus rizomas rastreros, formando a la larga un espléndido cubresuelos en una ladera o largos bordillos de aspecto cuidado. Su follaje, muy denso, será más o menos persistente según la rigurosidad del invierno, y por lo tanto atractivo la mayor parte del año. En Japón, su país de origen, este bambú es a menudo plantado en masa en las rotondas donde no requiere mucho mantenimiento, salvo un riego ocasional en caso de sequía prolongada y una o dos siegas al año para devolverle vigor y un aspecto de tapis espectacular. ¡Invítelo a un jardín natural para reemplazar al boj o incluso al césped en zonas no transitadas, o destáquelo en una maceta en la terraza!

El Pleioblastus pygmaeus es una especie de bambú botánico bajo y muy tupido, de porte particularmente compacto. Como todos los bambúes, pertenece a la familia de las poáceas o gramíneas. Este Pleioblastus está bien adaptado a nuestros climas templados y a nuestros inviernos fríos, tolera también sequías pasajeras, y se desarrolla bien en todas las exposiciones y en todo tipo de suelo sin exceso de caliza. Sin embargo, teme los suelos encharcados en invierno. Este bambú presenta cañas huecas, verdes, muy delgadas, con un diámetro de 1 a 2 mm, y que no superan 1m de altura. En cultivo, generalmente se mantiene a 40 cm de altura mediante una siega anual. De crecimiento rápido, se extiende a través de sus rizomas rastreros (una característica que se acentúa más o menos según el clima y la naturaleza del suelo) sobre grandes superficies y forma un denso tapiz exuberante. Su follaje semi-persistente está compuesto por hojas encajadas, de un hermoso verde brillante en el haz, más claro en el envés. Este bambú tolera muy bien la competencia de las raíces de otras plantas, pudiendo incluso sobrepasarlas en algunos casos.

Robusto, rústico y poco exigente, este bambú tiene éxito casi en todas partes, llegando a ser invasivo. Para contener su desarrollo, le recomendamos dejarle una gran ladera o utilizar barreras anti-rizomas para proteger las plantas vecinas de sus ardores. Se adapta perfectamente a jardines zen, salvajes, exóticos o de aspecto contemporáneo. Soporta bien el pleno sol pero también la sombra en climas cálidos y muy soleados, puede ser utilizado en el borde de bosques o incluso en claros del bosque, como cubresuelos bajo árboles como el arce japonés, el Acer griseus o los arces japoneses. También puede formar grandes bordillos bajos, por ejemplo para reemplazar al boj a lo largo de un camino, de un macizo, o para realizar separaciones entre diferentes zonas del jardín. Incluso puede reemplazar al césped en lugares poco transitados del jardín. Este bambú enano también puede ser cultivado en maceta para embellecer el balcón, la terraza, e incluso un interior muy luminoso y poco calefaccionado.