Phyllostachys parviflora - Bambú

El Phyllostachys parviflora, conocido en chino como "bambú dorado de Anji", es un bambú gigante muy resistente, bien adaptado a suelos húmedos y climas fríos. Se distingue por sus hojas de tamaño pequeño, dispuestas de manera irregular, que le confieren una apariencia característica, ligera, aérea y llena de encanto. Es un bambú vigoroso, con rizomas rastreros, de crecimiento bastante rápido pero menos explosivo que su primo el Phyllostachys vivax. Sus brotes jóvenes están rayados de amarillo y sus cañas jóvenes, gruesas y sólidas, adornadas con anillos cubiertos de una pruina clara, son de color verde claro con rayas moradas. Este bambú infinitamente gracioso se luce cerca de puntos de agua o en grandes matas aisladas en un gran jardín.

Originario de China, en las provincias de clima suave de Zhejang, cerca de Hangzhou, y la región de Anji, el Phyllostachys parviflora es un vigoroso bambú que parece ser muy resistente al frío. Posee una cepa rastrera, y sus rizomas están provistos de canales de aireación lo que le permite soportar suelos muy húmedos, pantanosos e incluso ocasionalmente inundados. Pertenece a la familia de las poáceas (o gramíneas), es una especie de gramínea gigante con tallos leñosos.

Presenta un porte erguido, con ramificaciones cortas, frondosas y bastante erectas. La cepa emite brotes jóvenes en junio-julio, más o menos numerosos según los años. Son oblicuos, en forma de jabalina, cubiertos de una vaina purpúrea sobre la cual aparecen rápidamente rayas amarillas. Estos brotes liberan cañas o tallos de 6 a 7 cm de diámetro con una pared bastante gruesa, resistente a vientos fuertes. Son capaces de crecer varios centímetros por día para alcanzar 7 a 8 m de altura. Cada tallo es de color verde claro, los entrenudos están atravesados por finas rayas púrpuras y los nudos cubiertos por una pruina casi blanca. Con la edad, las cañas se vuelven grisáceas. El follaje, persistente, está compuesto por hojas pequeñas y estrechas que miden 4 a 6 cm de largo y 8 mm a 1,2 cm de ancho. Su color es un verde claro y brillante. Perfectamente resistente, este bambú aguanta al menos hasta -20°C. Sin embargo, en caso de nevadas, se deben sacudir sus cañas para liberarlas. Esta especie teme especialmente los suelos calizos y es bastante difícil de multiplicar por división de cepa.

Estrella indiscutible de los jardines de inspiración asiática, el bambú gigante se adapta a muchos estilos, desde los más contemporáneos hasta los más exóticos, pasando por los jardines naturales o los jardines acuáticos. Plantado en masa, permite crear rápidamente bosques muy exóticos, su grafismo aporta verticalidad al paisaje. Su crecimiento rápido lo convierte en un excelente candidato para ocultar vistas no deseadas, especialmente si se encuentra en un suelo fértil y fresco. Su presencia es tal que se puede plantar en matas aisladas. Sin embargo, en parterres, su estilo único a veces es difícil de combinar. Prueba, por ejemplo, a combinarlo en un entorno exótico y en un suelo muy fresco con otras especies gigantes como la Gunnera manicata o la Hosta Big Daddy, un Rododendro grande si tu suelo y clima lo permiten. Los bambús se combinan muy bien entre sí, elige variedades con tallos de diferentes colores. Siempre quedan perfectos cerca de puntos de agua donde encuentran frescor. Un gran paseo bordeado a ambos lados por bambús gigantes parviflora se convierte simplemente en una avenida real.

Los brotes jóvenes de este bambú, recolectados muy jóvenes, son comestibles y muy apreciados por los gourmets.