Juniperus communis Goldschatz - Enebro común

El Juniperus communis 'Goldschatz' es un enebro común especialmente recomendable para los pequeños jardines. De crecimiento relativamente lento, adopta un porte rastrero y ondulado en la superficie del suelo. Su follaje perenne tiene un color amarillo muy luminoso y atractivo. Mucho más ancho que alto, es un conífero cubresuelos perfecto para adornar una rocalla, cubrir un talud o embellecer una terraza una vez plantado en maceta o en contenedor. Fácil de cultivar, no teme al frío, resiste bien la sequía una vez establecido, se conforma con un suelo pobre, incluso calcáreo... Prefiere situaciones muy soleadas, pero tolera la semisombra temporal durante el día.

El Juniperus communis es un conífero persistente y espinoso perteneciente a la familia de las Cupresáceas, que incluye especies cercanas como los Cipreses y los Chamaecyparis. Es originario del norte de Europa, América del Norte y Asia Menor. En su entorno natural, presenta un porte bastante variable, cónico o extendido, pudiendo alcanzar los 6 m de altura y 3 a 4,50 m de envergadura. Esta especie aprecia los suelos pobres, arenosos y/o calcáreos, y no teme las condiciones áridas.

El enebro 'Goldschatz', derivado de esta especie, tiene un crecimiento mucho más moderado. Después de una década de plantación, alcanzará aproximadamente 1 m a 1,50 m de envergadura, con solo 20 cm de altura. Extendiendo ampliamente sobre el suelo, emite cortos brotes dorados, bien ramificados, que le dan un aspecto general algo ondulado. Las cortas hojas (10-15 mm) estrechas y puntiagudas en sus extremos, implantadas en grupos de 3 en los tallos, son de color verde, un poco grisáceas en la base de las ramas, y bien amarillas al estirarse. La gran adaptabilidad de este enebro le permite prosperar en la mayoría de los suelos, calcáreos, incluso pobres, neutros o ligeramente ácidos. Una vez establecido, resiste bien la sequía, pero también se satisface con un suelo fresco, siempre que esté bien drenado, ya que no le gusta el exceso de agua. Prefiere el pleno sol, pero soporta algunas horas de sombra al día. Muy resistente (hasta -20 °C), es una planta fácil de cultivar y encontrará su lugar en la mayoría de los jardines. 

El enebro 'Goldschatz' merece bien su nombre (tesoro en oro en alemán) porque realmente es una joya para el jardín. Una rocalla soleada será para él un perfecto marco, ya que podrá extenderse entre las rocas y crear un punto luminoso de buen gusto. También se integrará felizmente en un jardín contemporáneo o un jardín mineral en el que se privilegien los materiales oscuros, como barras de pizarra, por ejemplo. El amarillo luminoso de su follaje equilibrará así el tono oscuro de la roca. Su porte rastrero y su color dorado permitirán bellas asociaciones con follajes verde oscuro, como el del magnífico Viburnum davidii (en suelo neutro), persistente y bien lustroso. El Mahonia aquifolium 'Apollo' ofrecerá una floración en tono sobre tono y un contraste de follaje en todas las estaciones, ya que pasa del verde oscuro en temporada al púrpura en invierno. El Juniperus 'Blue Arrow' y su columna azulada ofrecerán un espectáculo permanente en el fondo de nuestro 'Goldschatz', mientras que un Albizia 'Summer Chocolate' lo dominará con una sombra lo suficientemente ligera como para no molestarlo, creando la sorpresa con su follaje finamente recortado casi negro, respondiendo al amarillo luminoso del enebro.