Pino rojo japonés Jane Kluis - Pinus densiflora

La forma natural de Pinus densiflora 'Jane Kluis', este pequeño pino rojo japonés, evoca un parasol ligeramente más ancho que alto. Este maravilloso pequeño árbol está dotado de una textura notable y de una vegetación tan densa que llena todos los espacios vacíos de su ramaje. En el extremo de las ramas, sus grandes y luminosos yemas blancas emergen de un abanico de largas agujas verde claro y brillante, anunciando el final del verano. En primavera se alargan en brotes rosados a rojizos, cubiertos de pequeñas agujas verde claro que se alargan y se oscurecen al mismo tiempo que se abren en una amplia corona solar durante el verano. Su crecimiento lento y su tamaño reducido le permiten encajar en los pequeños jardines, animar el rocalla y destacar en primer plano en la terraza o el balcón. Es una variedad ideal para el arte del bonsái. Aprecia el sol y un suelo drenado, ordinario.

El Pinus densiflora, también conocido como pino rojo japonés o pino parasol del Japón, es una planta de la familia de las pináceas originaria de los bosques situados en el noreste de China, Corea y Japón. En su entorno natural, esta especie supera los 30 m de altura y presenta un porte variable, una forma naturalmente enrollada y a menudo varios troncos cubiertos de una corteza roja. Apreciado por su madera en Japón, esta especie también alberga bajo su frondosidad el cultivo del matsutake, un hongo muy aromático.

La variedad 'Jane Kluis' se distingue de la especie salvaje por su tamaño reducido y su porte naturalmente tabular particularmente denso que se puede acentuar eventualmente mediante la poda en mayo-junio. Su crecimiento es muy lento, de modo que a los 10 años, alcanzará aproximadamente 50 cm de altura por 1,50 m a 2 m de envergadura. Su tronco a menudo retorcido lleva ramas casi horizontales, de las cuales parten ramitas con una corteza anaranjada que se vuelve gris y se desprende en placas con la edad. Está cubierto de agujas finas, de 10 cm de largo, agrupadas de 2 en 2 y dispuestas en coronas planas. Las grandes yemas blancas que aparecen en septiembre en el centro de los abanicos, en el extremo de las ramitas, contribuyen en gran medida al atractivo estético de esta variedad. Toman bonitos tonos a medida que se desarrollan. Los brotes situados en el centro del ramaje son los más grandes y ocupan el espacio superior, mientras que los brotes laterales, más modestos, llenarán el espacio periférico.

El Pino rojo japonés 'Jane Kluis' encontrará su lugar en los jardines más pequeños, aislado, en un rocalla o en el fondo de un macizo. Formará un magnífico ejemplar en maceta que realzará el balcón o la terraza. Se luce en un jardín japonés y se combina bien con grandes piedras, líneas geométricas de piscinas y estructuras de albañilería. Se puede asociar con gramíneas, muy complementarias, o con coníferas enanas de porte rastrero (Juniperus horizontalis Blue Chip), globulares (Picea abies Little Gem) o columnares (Juniperus communis 'Sentinel'). Las verdaderas cualidades gráficas de las coníferas se imponen naturalmente en el diseño de un jardín contemporáneo, que prefiere el esteticismo de las formas, las siluetas y las texturas a la danza de las floraciones. Estas plantas con una permanencia tranquilizadora estructuran duraderamente un macizo, marcan los senderos, bordean la terraza, sustituyendo fácilmente la presencia fuerte del boj recortado o del acebo. Se trata de jugar con los volúmenes y los colores.