Sabal causarium - Palma de sombrero

El  Sabal causarium es una gran Palmera originaria del Caribe, más precisamente de La Española, de Puerto Rico y de las Islas Vírgenes Británicas. Comúnmente se le llama Palmera sombrero, porque sus hojas eran utilizadas localmente para la confección de sombreros de ala ancha. En sus tierras de origen, crece en pinares y rocallas, y se instala fácilmente en campos antiguos y tierras sin cultivo. Se caracteriza por un porte esbelto, compuesto por un falso tronco recto, liso y gris, coronado por un conjunto de palmas bastante estrecho, un poco desaliñado. Aún se evalúa bastante mal el comportamiento de este sabal en nuestros climas, pero parece que es capaz de resistir bastante bien al frío y a la falta de agua una vez establecido. Es una planta que deleitará a los coleccionistas de especies raras y a los aficionados a los desafíos.

El Sabal causarium pertenece a la familia de las arecáceas. Puede alcanzar los 16 m de altura en la naturaleza, probablemente entre 10 y 12 m en Francia. Esta especie muestra un crecimiento lento a muy lento, sobre todo durante los primeros años de cultivo.

Desarrolla un único falso tronco (estípite), cilíndrico, recto, robusto, esbelto, de color gris, liso, alcanzando a veces los 50 cm de diámetro por 8 m de altura. El estípite se forma al cabo de 10 a 12 años. El follaje se dispone en una corona terminal en el extremo del estípite, pudiendo llegar a tener una envergadura de 4 m. La corona está compuesta por 20 a 30 hojas costapalmadas, es decir, hojas palmadas dispuestas en abanico alrededor de un eje central. En el Sabal causarium, cada hoja, de 1 m de ancho, tiene un color verde medio. Está dividida en 60 a 120 segmentos rígidos, más o menos 'quebrados', con una extremidad bífida. La floración, que ocurre en individuos maduros, consta de inflorescencias ramificadas, con flores blancas bisexuadas (tanto masculinas como femeninas), erguidas o colgantes, sobresaliendo de las hojas. Dan paso a frutos ovales a globulares y negros que miden de 1,5 a 1,9 cm de diámetro.

El Sabal causarium es un bello ejemplar para plantar aislado en jardines a orillas del mar, o en alineación, especialmente en climas cálidos. Su rusticidad dependerá sin duda mucho del drenaje del suelo, de la duración de las heladas y de la humedad ambiental. Instale esta especie rara y prestigiosa cerca de una entrada, o a ambos lados de un portal, plantada aislada cerca de una piscina, será magnífica y le valdrá la admiración de sus visitantes.