Amaryllis Candy Cream - Hippeastrum

El Amarilis 'Candy Cream' (sinónimo Candy Queen) es una variedad de hippeastrum que debe su nombre al color rosa brillante de sus flores, pero también a sus altivos tallos florales. El centro de las flores es blanco, al igual que los estambres. Es una variedad realmente suntuosa. Será perfecta en los ramos de invierno, asociada con follaje verde abeto, acebo o jacintos blancos forzados en el interior.

De la familia de las Amarilidáceas, los Hippeastrum son originarios de Sudamérica y América Central. Se cultivan en macetas bajo nuestras latitudes y florecen en el interior de las casas en la época de Navidad. En plena floración, la variedad 'Candy Queen' alcanza 65 a 75 cm de altura y 30 cm de ancho. Las flores en forma de amplios embudos abiertos miden hasta 23 cm de diámetro. Esta floración inmensa está compuesta por 6 pétalos anchos y gruesos, brillantes e irisados, de color rosa tirando a rojo. El corazón de la flor es blanco dejando escapar un ramillete de largos estambres curvados del mismo tono. 4 a 5 flores sobresalen altivamente sobre uno o dos grandes y gruesos tallos huecos. Posicionadas espalda con espalda, forman juntas una composición única. Las hojas son en forma de cinta y de un verde oscuro lustroso. Amarillean y se secan poco tiempo después de la floración, mientras que el grueso bulbo entra en reposo.

Plantar un Amarilis es muy gratificante. El Hippeastrum Candy Cream es muy fácil de cultivar y su crecimiento es extremadamente rápido; 8 semanas después de la plantación, las flores ya se abren. Podrás disfrutarlas durante todo el invierno. Para regalarlo en Navidad, piensa en plantarlo a principios de noviembre. Exposición preferiblemente al sol, frente a una ventana por ejemplo. Recorta el tallo cuando las flores se marchiten para favorecer la remontada floral.

¿Sabías que? La denominación latina "« Amaryllis » fue objeto de acaloradas discusiones entre los botánicos: en origen, este nombre designaba de hecho otra planta, de aspecto similar y originaria de Sudáfrica: el Amaryllis belladonna. Cuando Carl von Linné utilizó este nombre para designarla, pero también para designar al Hippeastrum (¿todavía nos sigues?), se desató la polémica y la batalla se prolongó hasta 1987, cuando los botánicos decidieron: el nombre latino Amaryllis se conserva para la especie africana belladonna pero ya no debe ser utilizado como nombre latino para los Hippeastrum.