Ornithogalum balansae

El Ornithogalum balansae es una pequeña bulbosa que solo espera ser adoptada. Aunque todavía es poco común en nuestros jardines, nos obsequia con una encantadora y generosa floración primaveral. Es una miríada de estrellas blancas con un bonito corazón amarillo mantequilla que estallan al sol desde el mes de marzo en las regiones más suaves. Rústica, esta vivaz soporta el frío y puede quedarse en tierra en la mayoría de nuestras regiones. Sin embargo, su cultivo en macetas permite disfrutar de ella lo antes posible.

Si deseas una primavera luminosa y alegre, no dudes en plantar el Ornithogalum balansae en la parte delantera de tus parterres o en macetas. Aprecia los suelos drenados que no retienen excesivamente la humedad y las exposiciones soleadas o ligeramente sombreadas. Resistente a temperaturas por debajo de -5°C, es adecuada para la mayoría de nuestros climas. Si las condiciones le son favorables, incluso pueden aparecer bulbillos en la periferia del bulbo principal, aumentando la población y multiplicando las flores. Estas están agrupadas en corimbos llevados por tallos flexibles, ligeramente sueltos, rodeados por largas hojas en cinta, que también se doblan al desplegarse. El conjunto se extiende entonces en unos 10 cm de ancho y una altura de aproximadamente 10 cm, pero puede alcanzar dimensiones más grandes en climas más favorables. Las flores están compuestas por 6 tépalos blancos cuyo reverso está marcado por una lengua central verde. Se abren ampliamente y revelan un pequeño corazón amarillo bordeado de estambres. Estas pequeñas estrellas diáfanas suelen aparecer en abril-mayo, pero su cultivo en maceta acelerará su precocidad.

El Ornithogalum balansae se sentirá bien en compañía de los 'bulbos de primavera' que encontrarás en nuestra selección. Junto a los Puschkinias, Crocos, Chionodoxas y Jacintos, iluminará los bordes de los senderos, las rocallas soleadas, pero también los balcones. Es una bulbosa que merece su lugar y aporta delicadeza a la salida del invierno.