Narciso Ségovia

El Narciso Ségovia es un narciso que florece a finales de marzo. Produce pequeñas flores sorprendentes que desprenden un perfume embriagador. Están compuestas por un perianto blanco redondeado y una corona amarilla muy abierta. Están situadas en largos tallos de 15 cm. Su follaje verde es caduco. Las hojas, de forma ensiforme (en forma de espada) pueden sobrepasar al tallo floral, ya que a menudo alcanzan los 50 cm de longitud.

Esta variedad alcanza en la edad adulta una altura de 30 cm. Originario de la cuenca mediterránea, el narciso se encuentra en céspedes, rocallas, bordillos de plantas vivaces pero también en jardineras y en macetas. Sus flores se pueden colocar en un jarrón. En este caso, lo mejor es no mezclarlas con otras flores.

Hoy en día, los Narcisos son cada vez más apreciados porque son sinónimo de primavera. El Narciso a pequeña corona es tóxico y no tolera las inclemencias del tiempo como la lluvia que daña la flor. Sin embargo, es uno de los bulbos más resistentes de otoño. Además, es una planta fiel que vuelve cada año. El narciso proviene de una leyenda griega en la que un apuesto joven rechazó el amor de la ninfa Eco. Entonces, los dioses hicieron que solo amara su propia imagen para castigarlo. Cuando se posó sobre un manantial para beber, Narciso vio su reflejo y se quedó contemplándolo hasta ahogarse. Se transformó entonces en una flor.