Tulipa whittallii - Tulipan botánico

Tulipa whittallii, una variedad botánica de tulipán, tan hermosa y delicada, en naranja cobrizo infundido de naranja sanguíneo, más oscuro en el interior y adornado con una sombra verde oliva en la base de sus pétalos. Una especie inusual y rara, muy distante de sus primas holandesas con elegancia calibrada y porte rígido. Se revela fácil de cultivar y duradera en el jardín. Ofrece en abril-mayo flores en forma de copa perfecta, con pétalos lanceolados y afilados, atravesados por la luz, dando lugar a través de su sustancia a un caleidoscopio flamboyante. Esta planta bulbosa es una maravilla cuando se planta en grandes masas en un césped, un macizo un poco salvaje, o en macetas. Se sentirá a gusto al sol, en un suelo drenado y bastante fértil.

El Tulipán Botánico whittallii pertenece a la familia de las liliáceas. Esta "especie" es en realidad un clon tetraploide* que apareció de forma natural y fue descubierto cerca de Esmirna, en el oeste de Turquía. Está relacionado con el tulipán orphenidea, y muestra una apariencia bastante variable, tomando tonos más o menos rojos, naranjas o amarillo anaranjado según las formas, el clima y el suelo que lo acoge. Este tulipán no superará los 30 cm de altura en floración. Su follaje es verde grisáceo, un poco azulado, compuesto por 2 a 7 hojas estrechas, lineales, puntiagudas en su extremo. Tan elegantes como su follaje, las flores de 4 a 6 cm de diámetro aparecen en abril-mayo, más temprano o más tarde según el clima. Solitarias, o agrupadas de 2 o 3, son llevadas por tallos gráciles pero sólidos, que se doblan suavemente al viento. Ovales y fusiformes, se abren ligeramente en plena floración, en un cáliz perfecto, compuesto de pétalos con extremo puntiagudo. La base de los pétalos y el corazón de la flor están manchados de verde oliva, mientras que el interior de la copa muestra un tono casi rojo, a veces matizado de marrón. Las flores se abren al sol y se cierran cuando se esconde. Este tulipán se propaga por estolones y forma a la larga hermosas colonias.

Los tulipanes botánicos no degeneran con el tiempo como los tulipanes de grandes flores. Se naturalizan y pueden permanecer en su lugar varios años sin cuidados especiales y se sienten a gusto en los bordillos y las rocallas. Para crear escenas coloridas, se pueden asociar con diversas pequeñas plantas bulbosas: Crocos, Muscaris, Cyclamen coum, Campanillas de invierno, Escilas... Estos tulipanes son inigualables para llevar el color de la primavera en macetas o en jardines soleados.

En Francia existen diversas especies silvestres, muchas de las cuales están amenazadas. En cultivo, se les llama « tulipanes botánicos », y una de las más comunes es el tulipán silvestre (Tulipa sylvestris), que antiguamente crecía a menudo al abrigo de las vides y cuya subespecie australis es conocida como tulipán meridional.

* Tetraploide: su conjunto cromosómico base (2n) se multiplica por 2, por lo que es una planta "4n".