Caladium Rosebud

El Caladium Rosebud es una variedad original y brillantemente colorida, que tolera mejor el sol que las variedades de follaje claro. Sus grandes hojas de un hermoso verde franco lucen una gran mácula central y venas de color rosa vivo, un halo blanco separando los dos colores. Planta tuberosa muy apreciada en el siglo XIX por aportar un toque exótico a los interiores elegantes, el Caladium regresa en grande en macetas, pero también en parterres de flores efímeras donde sus grandes hojas en forma de corazón y disfrazadas de Arlequín siempre causan un gran impacto. Originarios de América tropical, los Caladiums son plantas de media sombra sensibles al frío que se cultivan como anuales en el jardín, o en macetas en el interior, en un invernadero o una terraza. Se almacenarán los tubérculos en seco y fresco en invierno.

El género Caladium pertenece a la familia de las Aráceas y comprende alrededor de 12 especies originarias de Brasil y regiones adyacentes de América Central y del Sur.  En el lenguaje común, se les llama orejas de elefante, corazón de Jesús y alas de ángel debido a la forma de sus grandes hojas. En la naturaleza, estas plantas tuberosas crecen en claros y en las orillas de los ríos. Están en vegetación durante la temporada de lluvias, pero entran en dormancia para escapar de la estación seca. Cabe señalar que todas las partes de la planta son tóxicas para el ser humano.

El Caladium híbrido Rosebud forma a partir de la primavera un manojo de hojas que mide aproximadamente 50-60 cm en todas direcciones. Las hojas, que miden aproximadamente 35 cm de longitud por 20 cm de ancho, tienen una forma característica de corazón alargado y festoneado, con una punta afilada. Cuando ocurre, la floración es bastante insignificante. Toma la forma de una espata o cuerno amarillento que rodea una columna llamada espádice, característica de las plantas de la familia de las aráceas. A principios de otoño, es necesario reducir los riegos. El follaje se seca, señal de que la planta entrará en reposo. Es el momento de desenterrar los tubérculos que pasarán el invierno en turba apenas húmeda, a la sombra, en una habitación fresca, mantenida entre 16 o 18 °C.

El Caladium Rosebud llevará un toque muy exótico a los parterres de media sombra durante toda la temporada de crecimiento, y su follaje particularmente colorido realzará todas las plantas vecinas. Colóquelo, por ejemplo, al pie de los hortensias, de las azaleas japonesas o de los rododendros enanos, o cree una bonita escena con Impatiens, hostas y lobelias que aprecian las mismas ambientaciones de sotobosque. Cree también con los caladiums preciosas macetas floridas para la terraza o la veranda. Se asocian maravillosamente con los Coleos, los Begonias y los Impatiens.