Gladiolo papilio Ruby

Este Gladiolo o Gladiolus papilio 'Ruby', resistente en suelo drenado y dotado de preciosas flores rojo rubí manchadas de granate, invita a mirar de otra manera a estas plantas. Se trata de una forma rara y precoz del bonito gladiolo papillon, cuyas flores notablemente coloridas también son más compactas en el tallo y un poco más grandes que las del tipo. Florece de junio a julio hasta septiembre a octubre en los macizos soleados y se multiplica rápidamente para formar magníficos grupos, de donde emergen tallos elegantes, a la vez delgados y sólidos, divinamente floridos.

El género Gladiolus pertenece a la familia de las iridáceas, las variedades cultivadas son híbridos repartidos en 3 grandes grupos: Grandiflorus (de grandes flores), Primulinus (temprano) y Nanus (papilones). 'Ruby' pertenece a los Nanus, caracterizados por flores bastante pequeñas y a menudo manchadas, dispuestas irregularmente en tallos de 60 a 70 cm de altura, cada uno llevando hasta 20 floretes. El pétalo superior de cada flor tiene forma de casco curvado.

'Ruby' es un cultivar reciente, derivado entre otros del Gladiolus papilio, una especie originaria de las zonas pantanosas y montañosas de Drakensberg, en Sudáfrica. Es una planta herbácea vivaz y caduca con raíces estoloníferas. Su follaje está compuesto por hojas delgadas, bastante cortas, en forma de gladio, de color verde-gris, dispuestas en abanico y formando un grupo de 60 cm de altura. Las hojas están coronadas por una inflorescencia en espiga con hasta 7 botones, cuyas flores con capuchón se asemejan a las de algunas orquídeas o incluso a los cannas, y son llevadas por tallos muy delgados. Aquí son de un rojo rubí, con garganta púrpura, y toman un tono púrpura antes de marchitarse. El órgano de reserva es un cormo, un pseudobulbo correspondiente a un tallo hinchado provisto de escamas. Cada cormo producirá 2 o 3 tallos florales.

El Gladiolus papilio Ruby tiene grandes posibilidades de cambiar la percepción de los detractores de esta planta, a menudo considerada rígida y carente de elegancia hasta el punto de relegarla entre las hortalizas del huerto para la reserva de flores cortadas. Los gladiolos y sus largos tallos coloreados son símbolo de los años 70 y de composiciones florales un tanto rígidas. Si bien son insustituibles en ramos, en los jardines, su silueta necesita la compañía de plantas con follaje exuberante que realzarán su floración. Plante 'Ruby' en los macizos de gramíneas, nomeolvides y lino azul, por ejemplo. Juegue con el blanco para la elegancia y añada aquí y allá un follaje plateado. Los gladiolos son habituales en los pequeños jardines amurallados, donde acompañan a las hortalizas hasta el huerto. Para hacer ramos, corte los tallos florales cuando el primer florete se abre.

 
El gladiolo debe su nombre a la forma de sus hojas en gladio, derivado del latín gladius. Sus formas salvajes a menudo se representaban en joyas o en tapices y telas realizados por los semitas antes de la era cristiana.