Lirio Scheherazade

El  Lirio trompeta 'Schéhérazade' es un híbrido robusto y florífero que ofrece en verano grandes flores en contraste con agradables tonalidades de rojo vino, blanco y crema en el corazón de la corola. Las flores desprenden un perfume embriagador y embriagante. De cultivo fácil, fiable y florífero como las especies orientales, esta variedad también es resistente como el lirio real que participa en su ascendencia. 'Schéhérazade' es grandiosa en macizos o incluso en grandes rocallas, impecable también para la flor cortada.

El género Lilium pertenece a la familia de las liliáceas, estos representantes son plantas bulbosas de follaje caduco, con un porte en mata estrecha y muy vertical a partir de la primavera. 'Schéhérazade' es un híbrido obtenido por un cruce entre el lirio 'Thunderbold' y 'Black Beauty'. También está relacionado con el lirio real, originario del Oeste de China, que le confiere su vigorosa vegetación y su carácter fiable. Esta planta alcanzará 150 cm de altura en flor, y la mata se extenderá sin límite teórico con el tiempo, los bulbos produciendo bulbillos por multiplicación vegetativa. En pleno verano, en julio-agosto, aparecen umbelas de trompetas de 15 cm de diámetro con un perfume exquisito. La corola de cada flor está compuesta por 6 pétalos rojo vino oscuro, con margen crema que se aclara con la edad. Estos magníficos colores están salpicados con algunas manchas rosas, verdes y marrones como un toque final aportado por un pintor meticuloso. Las tallos son muy fuertes, casi irrompibles lo que predispone a 'Schéhérazade' para la elaboración de ramos para el hogar. Las hojas, de verde oscuro y brillante, son lanceoladas.

Planta de tierra rica en humus, este lirio no aprecia los suelos calizos, mal drenados y pesados. Puede asociarse con plantas perennes ya que prefieren tener el pie en la sombra. Estas últimas ayudarán a evitar que los tallos se doblen por el viento. Los lirios de flores en trompeta tienen mucho éxito en los jardines, suelen ser bastante resistentes y son plantas vigorosas. Florecen fielmente, con más abundancia cada año si se les proporciona lo que necesitan. Son indiscutiblemente elegantes en macizos, y son el sello distintivo de un jardín bien cuidado y bien diseñado al que aportan un encanto especial.