Dalia cactus Samourai

El Dahlia semi-cactus Samouraï aporta algo muy nuevo en esta categoría de dalias, tanto por la estructura como por el colorido de sus inflorescencias: grandes pompones erizados, compuestos por finos pétalos juguetones rosa ciclamen y pétalos más cortos, blanco crema, todos fusionándose en un corazón de un rosa más suave. Esta variedad causará sensación en los macizos soleados y sus flores permitirán componer ramos audaces. 

Los Dalias son plantas de tubérculos de la gran familia de las asteráceas, originarias inicialmente de las mesetas altas de México. En la actualidad, las miles de variedades hortícolas han invadido, para nuestro mayor placer, los jardines de todo el mundo. Son vivaces poco rústicas, con tubérculos carnosos. La variedad 'Samouraï', registrada en 1990, alcanzará 1,10 m de altura, según las condiciones de cultivo, con 60 cm de envergadura. Está clasificada entre las Dalias cactus, más específicamente las dalias semi-cactus; se trata de una categoría hortícola definida por la forma de la flor. En este grupo, las lígulas coloreadas del capítulo se enrollan completamente, lo que les da un aspecto puntiagudo característico. La floración de esta variedad comienza en julio para terminar en octubre-noviembre. Los capítulos miden 18 a 20 cm de diámetro. Su porte es arbustivo y erguido, y los tallos muy ramificados son huecos. Sus hojas son opuestas, pennatiesectas, es decir, se dividen en 3 o 5 lóbulos dentados. Las hojas y tallos son de un verde medio, bastante vivo.  

Para extender el período de floración y favorecer las remontadas florales, asegúrate de retirar las flores marchitas. Mejor aún, recórtalas regularmente para componer  seductores ramos coloridos asociando varias variedades. 'Samouraï' se combina especialmente bien con floraciones blancas, rosas, violetas o moradas, especialmente con las de los rosales. En jarrón, combínalo con crisantemos y asters, por ejemplo. En macizo, se combinará perfectamente con Echináceas blancas o rosas y Cosmos, por ejemplo. 

Estrella de los bordillos y de los pequeños jardines amurallados, las Dalias acompañan sin complejos a las más bellas de las flores, pero también se aprecian junto a las plantas hortícolas. En México, este tubérulo fue cultivado inicialmente como hortaliza de raíz para ser consumida. Pero sus pobres cualidades gustativas la han asignado al rango de planta ornamental.