Colocasia esculenta

El Colocasia esculenta, el Taro, también conocido como oreja de elefante debido a sus hojas inmensas. También se le llama Gouet comestible o incluso chou-Chine, es una gran vivácea de suelo empapado muy cultivada en regiones tropicales por su tubérculo comestible. Espectacular, esta planta desarrolla largos pecíolos que llevan hojas en forma de corazón o de lanza. De color verde fresco, ligeramente plisadas y con una apariencia exótica, lucen maravillosamente cerca de puntos de agua. Su inflorescencia amarilla, en forma de cono llamada espata, revela su parentesco con nuestros lirios. Esta maravillosa planta tropical se sentirá cómoda en un interior luminoso y cálido, pero también en pleno suelo, a media sombra, en nuestras escasas regiones libres de heladas.

Sin duda originaria de India y Asia tropical, el Colocasia esculenta se ha extendido hace mucho tiempo en regiones tropicales de Sudamérica y Oceanía, y más tarde en África tropical. Esta vivaz rizomatosa es pariente de los Lirios y del Monstera deliciosa, pertenece a la familia de las aráceas. Con una ligera tendencia a producir chupones, esta planta herbácea vivaz se desarrolla a partir de un rizoma tuberoso, formando un cormo escamoso, cubierto por una piel gruesa. La planta adulta es un gran mechón expandido que medirá en promedio 1 m 50 de altura por 80 cm de diámetro en la base. Está compuesta por un magnífico follaje peltado, en forma de corazón ligeramente alargado, de un verde claro y franco, con nervaduras azul-gris más o menos teñidas de verde claro. La lámina de las hojas puede alcanzar 60 cm de longitud por 40 cm de ancho, llevada por un largo pecíolo violáceo a marrón, envainado en la base. La superficie de las hojas deja resbalar el agua, posee una buena capacidad de repelencia. Durante su crecimiento, la planta se ramifica desde la base y produce numerosos tubérculos que dan origen a pequeñas plantas vigorosas. Al eliminar una hoja vieja, surgen dos nuevas. La floración ocurre en sujetos maduros, en forma de espata amarilla, generalmente en verano.

El Colocasia esculenta se cultivará en maceta y se guardará en un invernadero durante el invierno, su rusticidad eventualmente podría permitirle soportar los climas mediterráneos más suaves. Esta vivaz exuberante aportará un toque muy exótico, instalada en una zona semisombreada, asociada con bambúes, un cicas, un Tetrapanax papyrifer, un plátano o incluso hibiscos. Se impondrá como un punto focal en una decoración contemporánea o exótica, tanto en la terraza plantada en una gran maceta como en las orillas de un punto de agua donde aprecia suelos empapados y ricos. Esta planta voraz se lleva bien con los lirios (Zantedeschia aethiopica), los plátanos, los Gunnera o los helechos arborescentes cuya magnificencia recuerda a los bosques prehistóricos. Esta planta aportará a nuestros jardines y balcones urbanos toda la exuberancia de sus tierras natales. También es una planta de interior muy hermosa, que con el tiempo, al igual que el Monstera deliciosa, se convertirá en una pieza clave en una decoración de estilo colonial-exótico, vintage, contemporáneo, inglés o tradicional.

El verdadero taro se consume en África, China, Polinesia y en varias otras partes del mundo. Se consumen sus tubérculos, ricos en almidón, y sus hojas jóvenes como espinacas.