Melón Jerac F1

Los melones necesitan un suelo rico en nutrientes y mucho calor para una hermosa fructificación. Elija una ubicación muy soleada y resguardada. Los pies de melón aprecian los suelos frescos y bien drenados. Airee la tierra a unos diez cm de profundidad sin voltearla. Aplique estiércol orgánico bien descompuesto. Si el suelo no es drenante, es posible construir una pequeña colina para cada planta.

En una primera etapa, haga crecer las mini-macetas trasplantándolas en cajitas o macetas de 8 a 13 cm de diámetro, llenas de compuesto. Coloque las plantas en un lugar cálido y luminoso. Riegue regularmente.

La plantación en terreno abierto se realiza cuando el riesgo de heladas ha pasado y la tierra está suficientemente caliente. Separe las plantas a 1 m en todas direcciones. Cave un agujero, instale su planta con el punto de injerto al nivel del suelo y cúbrala con tierra fina. Compacte bien y riegue para mantener la tierra húmeda.

El cultivo del melón requiere un riego regular (aproximadamente 2 veces por semana en verano, según el clima). Atención, riegue solo la base y no las hojas para evitar la aparición del mildiu y el oídio. Deshierbe y escarda regularmente.

Con las nuevas variedades de melón híbrido, ya no es necesario pellizcar las hojas. Solo realice la poda N°4 para obtener una fruta más bonita. En otros casos, especialmente para las variedades antiguas, siga estos pasos:

- Cuando la planta tenga 4 hojas, pellizque por encima de las dos primeras hojas para fomentar la ramificación. Así obtendrá dos ramas principales.

- Tan pronto como tengan al menos tres hojas, estas dos ramas serán pellizcadas nuevamente por encima de la tercera hoja en ambos lados.

- La operación se repetirá siguiendo los mismos principios en los nuevos brotes por encima de la tercera hoja.

- La cuarta poda se realiza durante el proceso de fructificación con un pellizco de una hoja por encima del fruto para dirigir la savia hacia el fruto y no hacia la formación de nuevas ramas.

Mantenga un máximo de 5 a 7 frutos por planta.

Dado que el melón es bastante exigente, puede cultivar después de él guisantes o habas.