Orégano BIO

El Orégano vulgar, en latín Origanum vulgare, es una planta aromática vivaz, perfectamente rústica, también conocida como Orégano silvestre o también Orégano vivaz. No debe confundirse con la Mejorana, Origanum majorana, aunque las propiedades medicinales de ambas plantas son similares. El Orégano forma parte de las Hierbas de Provenza. Es un gran clásico de la cocina mediterránea, especialmente italiana. Es insustituible para aromatizar las pizzas. Siembra de marzo a mayo.

Originario de Europa occidental y del sur, donde se encuentra de forma natural, el Orégano es una planta vivaz que pertenece a la familia de las Lamiáceas, al igual que el tomillo y la menta. Forma un manojo aromático de alrededor de 50 cm de alto por igual de ancho. Su follaje está compuesto por hojas redondas a ovales, de color verde oscuro. El Orégano se adorna, de junio a septiembre, con bonitas flores rosadas más o menos purpúreas. Es rústico hasta aproximadamente -17°C.

El Orégano es una aromática resistente y fácil de cultivar. Se instala al sol y prefiere suelos pobres, ligeros, incluso pedregosos y bien drenados. No teme a la caliza. Si su tierra es más bien húmeda y arcillosa, le recomendamos más bien cultivarlo en macetas o en una pequeña elevación donde se sentirá muy bien.

Es importante destacar que el Orégano también se conoce con los nombres de Orégano silvestre o Té rojo, lo que conduce con frecuencia a una confusión con su prima, la Mejorana de Jardín o Mejorana de Conchas (Origanum majorana), que es mucho menos resistente y cuyo aroma difiere. 

Recolección : El orégano se recolecta de mayo a octubre, cortando ramas con tijeras.

Conservación : El Orégano se conserva tradicionalmente secándolo. Es una operación simple y rápida que puede reemplazar por la congelación si le resulta más práctico.

El consejo del jardinero : En el jardín, no dude en mezclar los géneros colocando algunas aromáticas como el Orégano en medio de sus macizos de plantas vivaces o incluso en las rocallas. Es muy bonito y los aromas, a veces potentes, de las plantas aromáticas suelen tener la facultad de alejar a los insectos susceptibles de atacar a las plantas un poco sensibles como algunas rosas.