Cebolla Stuttgart Bio - Ferme de Sainte Marthe

También conocida como Stuttgarter Rieser, la Cebolla Stuttgart es una variedad que ofrece grandes cebollas amarillas, ligeramente aplanadas. Es de alto rendimiento y adecuada para la conservación invernal. Esta cebolla se siembra de febrero a abril (o en otoño para los climas templados) y se cosecha en julio-agosto.

El cultivo de la cebolla se remonta a tiempos muy antiguos: los egipcios la utilizaban mucho. Llegó a Europa durante la Edad Media. Su bulbo se utiliza para condimentar embutidos, salsas, caldos y tortillas. También se consume rellena, a la crema, en sopa, en tarta, frita o en buñuelos. Se utiliza también cruda como condimento en ensaladas y adobos, los pequeños bulbos se pueden conservar en vinagre. La cebolla tiene propiedades antisépticas, bactericidas, diuréticas y estimulantes, y contiene vitaminas (A, B1, B2, B5, C, E, PP) y minerales (calcio, hierro, flúor, magnesio).

La cebolla requerirá una aportación de compost bien descompuesto (2 kg/m²) a principios de primavera. Evitar aportes demasiado ricos en nitrógeno, a la cebolla no le gusta.  

Cosecha: Entre abril y junio, los ajos jóvenes se cosechan según las necesidades y su desarrollo. Cuando están completamente maduros, se arrancan las cebollas y se dejan secar al sol durante 2 días antes de guardarlas.

Conservación: Las cebollas maduras se conservan varios meses, las cebollas jóvenes, unos días en un lugar fresco.

El truco del jardinero: A la cebolla no le gusta la humedad ni los suelos demasiado pesados. Se recomienda un tratamiento con mezcla bordelesa contra enfermedades criptogámicas (hongos).