Col de Milan de Pontoise

El Col de Milán de Pontoise es una variedad de invierno, productiva y resistente al frío. Este repollo ofrece grandes cabezas compuestas por hojas verdes teñidas de violeta, ligeramente arrugadas. Es sabroso y se conserva muy bien. Siembra de mayo a junio para una cosecha de octubre a marzo.

También conocido como Col de Milán, Col cloque, Col crespa o incluso Col de Milán crespa, el Col de Milán lleva el nombre latino de Brassica oleracea sabauda (en latín, sabauda se refiere a la Savoie). Pertenece a la gran familia de las Brassicáceas (ex Crucíferas).

Originario, sin sorpresas, de Italia y más precisamente de Milán, este repollo es bastante similar al Col liso pero se diferencia por el aspecto arrugado o rizado de sus hojas. Existen numerosas variedades cuya producción se extiende de la primavera al invierno. Al elegir cuidadosamente sus semillas y distribuir las siembras en el tiempo, podrá disponer de esta hortaliza durante un período muy largo.

Hortaliza de otoño e invierno por excelencia, el Col de Milán resiste bien al frío. Es delicioso crudo en ensalada pero también se consume cocido, estofado con salchichas o incluso con pescado. Desde el punto de vista nutricional, esta hortaliza de hoja es notable: es bajo en calorías y muy rico en vitaminas C y B6, también contiene muchas fibras y minerales como el calcio.

En el jardín, al igual que casi todos los coles (la col de Bruselas es la excepción), el Col de Milán es una hortaliza exigente, requiere una excelente fertilización de fondo y una humedad regular.

Cosecha: se cosecha cuando su cabeza está bien llena cortándola simplemente al ras del suelo.

Conservación: los Coles de Milán se conservan bastante tiempo en la planta y se guardan varios días en el refrigerador. También se congelan muy bien después de haber sido blanqueados de 3 a 5 minutos en agua hirviendo con sal.

El truco del jardinero: Principal enemigo del repollo, la Andrómeda del repollo (Pieris brassicae) es una bonita mariposa blanca crema con pequeñas manchas negras que se despierta desde abril-mayo para causar estragos durante todo el verano devorando sus hojas. No se deje sorprender y opte por la prevención instalando de manera hermética, sobre arcos de huerto, un velo anti-insectos. Estos velos son fáciles de colocar y reutilizables para proteger, por ejemplo, sus cultivos de Zanahorias y Puerros.