Repollo rojo Tête Noire 3 (semillas)

El Repollo Rojo Tête Noire 3 BIO es una variedad de color rojo violáceo intenso, casi negro, que produce coles compactas y densas, de tamaño medio, para recolectar en otoño e invierno. Se siembra de marzo a junio, se trasplanta con un espacio de 40 cm entre cada planta y se cosecha 90 a 120 días después de la siembra, cuando la col está bien firme. Versátil en la cocina, sabroso, es perfecto en ensaladas, salteados, en macetas, relleno o fermentado.

El repollo liso rojo Tête Noire 3 tiene su origen en Europa, donde los repollos rojos se han cultivado durante siglos, especialmente en regiones templadas. Este tipo particular ha sido seleccionado por su hermoso color púrpura oscuro y su capacidad para resistir condiciones frescas, lo que lo convierte en una variedad tradicional muy apreciada. Esta variedad se inscribe en la larga tradición de los repollos lisos, cultivados por su forma compacta y su fácil conservación. Su nombre "Tête Noire" evoca claramente su color intenso y su aspecto robusto, características que han hecho su éxito entre los horticultores y jardineros.

El repollo liso, también conocido como repollo (Brassica oleracea capitata - "capitata" significa "cabeza"), es una planta hortícola perteneciente a la familia de las Brassicacées, anteriormente Crucíferas. Esta planta bianual, cultivada como anual, desarrolla una cabeza compacta cuya forma varía según las variedades: redonda, ligeramente aplanada o cónica. Sus hojas, lisas, presentan una gama de colores que van desde el verde claro casi blanco hasta el verde oscuro, a veces con reflejos azulados, hasta el rojo púrpura muy oscuro.

Aunque asociado a la temporada fría, el repollo se puede sembrar y cosechar casi todo el año. Se distinguen tres grandes categorías: los repollos de primavera (cosechados de abril a junio), los repollos de verano y otoño (disponibles a partir de julio) y los repollos de invierno, que prolongan la temporada hasta las primeras brotaciones primaverales.

En la cocina, el repollo liso es extremadamente versátil: crudo en ensalada rallada, cocido como acompañamiento de carnes o pescados, relleno, en sopa o incluso en chucrut. Se adapta tanto a recetas tradicionales como a preparaciones modernas.

En cuanto a la nutrición, el repollo es un aliado de elección: bajo en calorías, rebosante de vitaminas (C, B6, B9), fibras y minerales como el calcio.

En el huerto, es un cultivo accesible siempre que se satisfagan sus necesidades: un suelo profundo y bien enriquecido, un riego regular y una exposición soleada. Esta hortaliza aprecia especialmente los climas frescos y húmedos, donde prospera fácilmente.

Cosecha: se realiza cuando el repollo forma una bonita cabeza y antes de que las hojas comiencen a amarillear. Se realiza con un cuchillo, cortando justo debajo de la cabeza.

Conservación: el repollo se conserva varios días en el refrigerador. También se congela muy bien después de ser blanqueado en agua hirviendo con sal. Las variedades de invierno también se pueden dejar en pie. Por último, la elaboración de chucrut (fermentación láctica) permite conservar de manera sabrosa las variedades de otoño de cabeza blanca.

El truco del jardinero: no dudes en plantar, en medio de las filas de repollos o en el borde del tablón, Tagetes, Zinnias, Cosmos, Capuchinas o incluso hermosas plantas aromáticas como el Eneldo y el Hinojo.