Berro - Nasturtium officinale

El Berro, también conocido como Berro de agua, es una variedad de Berro semi-acuático con hojas tiernas, jugosas y ligeramente picantes, que se consumen tanto en sopas como en ensaladas. Se desarrolla en aguas corrientes poco profundas, como en las orillas de arroyos o incluso en macetas.

El Berro pertenece a la familia de las Brassicáceas, al igual que los coles y la Rúcula, con los que comparte su sabor picante. Mitad ensalada, mitad hierba aromática, el Berro es una planta herbácea con un sabor fuerte, ligeramente picante. Antiguamente utilizado por sus propiedades medicinales, se ha convertido en una hortaliza completa que se consume de diversas formas a lo largo de las estaciones: en cremas aterciopeladas en invierno o en ensaladas de primavera o verano. Es una planta rica en antioxidantes y betacarotenos.

Existen varios tipos de Berro cuyas cosechas se suceden a lo largo del año. Algunos, como el Berro de Fuentes, son claramente acuáticos, mientras que otros, como el Berro Alenés, se cultivan en terreno abierto, siempre y cuando este permanezca bien húmedo.

Cosecha: La cosecha del Berro de agua suele tener lugar 2 meses después de la siembra, debe ser regular ya que tiende a subir a flor. Se realiza cuando las plantas alcanzan una altura de + o - 20 cm cortando parte de las hojas en su base.

Conservación: Las hojas de Berro son bastante frágiles y se marchitan rápidamente, se pueden conservar en el refrigerador durante 2 o 3 días, con los tallos en agua en un frasco, como harías con un pequeño ramo. La congelación de las hojas es un poco engorrosa, es más interesante preparar algunas cremas que luego congelarás.

El truco del jardinero: El Berro de agua a veces se encuentra de forma natural, ten cuidado con la calidad del agua. De hecho, si está contaminada, puede acumular toxinas y albergar un parásito bastante peligroso, el duela hepática.