Nabo Oregon F1

El Nabo Oregon F1 es una variedad híbrida que produce deliciosos nabos con piel amarilla y carne blanca, de sabor dulce y suave. Forma raíces grandes redondas muy homogéneas en cuanto a tamaño, forma y color. Oregon es fácil de cultivar gracias a su precocidad, excelente rendimiento, resistencia a la rajadura en la raíz, buena resistencia al frío y buena salud general. Este nabo se puede consumir crudo o cocido en muchos platos. Se cosecha desde el verano hasta el otoño e incluso en inviernos suaves.

El nabo es conocido desde la Prehistoria y siempre ha formado parte de la alimentación de los habitantes de Europa del Norte. A menudo se consume cocido, gratinado, en puré o como acompañamiento de sopas, cocidos y estofados. Los nabos tempranos no necesitan ser pelados y se pueden consumir crudos, rallados y mezclados con otras verduras crudas. Las hojas jóvenes de nabo también se pueden consumir en sopas. El nabo tiene propiedades diuréticas, refrescantes, remineralizantes y contiene vitaminas (A, B5, B6, C, PP) y minerales (calcio, hierro, cobre, magnesio). Las numerosas variedades de nabos permiten una cosecha durante todo el año. Esta hortaliza de raíz presenta diversas formas (larga, semi-larga, redonda o plana) y colores (blanco, amarillo, rosa o violáceo). El nabo requiere una aportación de compost bien descompuesto (3 kg/m²) a finales de otoño o principios de primavera.

Cosecha : Los nabos se cosechan generalmente dos meses después de la siembra. Los nabos de primavera-verano se cosecharán según las necesidades y el tamaño deseado, de mayo a julio. Las variedades de otoño-invierno, destinadas a la conservación, se arrancarán a partir de octubre y antes de las primeras heladas. Para cosecharlos, levante con la horca y tire suavemente desde la base de las hojas.

Conservación : Dejar que los nabos se sequen unas horas en el suelo, cortar las hojas por encima del cuello. Los nabos se conservan varios meses en silo o en bodega, en arena seca, en un lugar fresco y oscuro.

El truco del jardinero : Plantar hinojo junto al nabo ayuda a repeler al escarabajo pulga y a la mosca del nabo, los dos principales problemas de este cultivo. Para una protección óptima, coloque un filamento anti-insectos. Realice escardas y azadas regulares.