Rábano Violet de Gournay Bio - Ferme de Sainte Marthe

El Rábano Violeta De Gournay es una espléndida variedad de invierno que produce raíces largas y carnudas, revestidas de una piel violeta magnífica. Su carne es blanca con un sabor muy dulce. Este rábano se siembra de julio a agosto y se cosecha de septiembre a noviembre.

El rábano es una planta hortícola bastante resistente anual o bienal, de la familia de las Brassicáceas, cuya raíz cruda es principalmente consumida, pero también las hojas recién recolectadas se pueden añadir a sopas o potajes.

Probablemente conocido desde la época neolítica, el rábano se cree que es originario del Extremo Oriente. El nombre "rábano" proviene del latín radix, que simplemente significa raíz. Aunque fue muy consumido por los antiguos egipcios, los romanos y más tarde en la Edad Media, en formas probablemente diferentes a las que conocemos hoy, no fue hasta el siglo XVI que el rábano negro llegó a Francia, y en el siglo XVIII que se empezaron a consumir los rábanos negros y los rábanos rojos y blancos pequeños.

Existen rábanos de diferentes colores, desde el rojo de los más comunes, hasta el rosa, blanco o gris. Se suelen clasificar en 2 grandes tipos: los rábanos redondos representados por variedades de raíz pequeña y los rábanos representados por variedades de raíz larga. También se encuentran los rábanos japoneses o "daikon" que presentan una raíz blanca y cónica larga, a veces comercializada como nabo.

El rábano de invierno tiene una raíz pivotante grande con piel negra, rosa o violácea. Su carne es blanca. Sus hojas son verdes y están cortadas formando un manojo compacto en la base de la planta. Su sabor es mucho más fuerte que el del rábano redondo. De sabor picante, se puede disfrutar cocido, como los nabos, o crudo, como las zanahorias.

El rábano de invierno posee numerosas virtudes, contiene vitamina C y azufre, así como fósforo y magnesio. Es anti-escorbútico y diurético, recomendado para personas con problemas de hígado y vesícula biliar.

Cosecha y conservación

La cosecha de los rábanos redondos y de verano se realiza de 4 a 6 semanas después de la siembra. Cosechar regularmente una vez que los rábanos estén formados, sin dejar que crezcan demasiado, ayuda a evitar que se vuelvan huecos e indigestos. Los rábanos redondos o de verano se consumen rápidamente. Las hojas recién recolectadas pueden cocinarse en una deliciosa sopa.

La cosecha de los rábanos de raíz larga tiene lugar de 4 a 5 meses después de la siembra. Recoja levantando con cuidado con un tenedor-bayo y deje secar sobre la tierra antes de guardarlos. Si pasan el invierno en la tierra, cúbrala con paja.

El truco del jardinero

Sembrar rábanos y zanahorias en la misma fila y al mismo tiempo permite separar naturalmente las semillas de zanahoria. Una vez hecho esto, la cosecha de los rábanos dejará espacio para que las zanahorias crezcan.

Para tener rábanos crujientes durante toda la temporada, es bueno espaciar las siembras.

Una siembra cada 2 a 3 semanas garantiza tener rábanos siempre perfectos para consumir.

También puede sembrar sus rábanos en macetas, con tierra y un riego regular.